Un nuevo estudio revela que los tatuajes aumentan el riesgo de padecer cáncer de piel
Y cuanto más grandes, peor

Imagen de cómo se hace un tatuaje sobre una pierda / Xeniya Stetsenko
Hasta ahora no había suficientes evidencias científicas que demostrasen que la tinta de los tatuajes está relacionada con un aumento del riesgo de padecer cáncer de piel. Eso es lo que sostiene el dermatólogo Ariel Ostad en declaraciones a la Fundación Contra el Cáncer de Piel, aunque desaconsejaba los tatuajes que estén cerca de un lunar, por mera precaución.
Sin embargo, parece que ha habido avances en esta materia y un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad del Sur de Dinamarca ha demostrado que la tinta sí aumenta el riesgo de padecer este tipo de enfermedad en un 62%.
¿Los tatuajes aumentan el riesgo de tener cáncer de piel?
Como detalla el informe elaborado por el Departamento de Salud Pública de la universidad danesa, la tinta, una vez en nuestra piel, se mueve y puede llegar a acumularse en los ganglios linfáticos , donde se acumulan. Partiendo de esta premisa, los científicos analizaron a un total de 5.9000 personas, concretamente gemelos y descubrieron que los individuos tatuados se les diagnostican con mayor frecuencia cánceres de piel y linfoma en comparación con los que no tienen tatuajes.
En este mismo estudio, en el que también ha participado la Universidad de Helsinki, observaron que los tatuajes afectaban al sistema inmunitario al absorber los ganglios linfáticos la tinta. Sabiendo esto, los investigadores manifestaron su preocupación ante la posibilidad de que la tinta provoque una inflamación crónica en los ganglios, lo que podría provocar un crecimiento celular anormal y un mayor riesgo de cáncer.
Otro de los datos novedosos que ha aportado este estudio es que la relación entre tatuajes y cáncer es más evidente en las personas con tatuajes más grandes, es decir, que superen el tamaño de la palma de la mano, como indica Jacob von Bornemann Hjelmborg , profesor de bioestadística de la SDU. El alcance del impacto en el sistema inmunitario debe investigarse más a fondo para que podamos comprender mejor los mecanismos en juego", añade.