Esto es lo que debes hacer siempre con las tostadas: nadie lo hace y es un gesto que lo cambia todo
Notarás la diferencia
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Imagen de una tostadora / Javier Zayas Photography
Hay prácticas rutinarias que hacemos cada día al levantarnos sin siquiera pensarlas. Una de ellas es, por ejemplo, prepararnos el café. Es una acción que llevamos a cabo casi de forma automática porque es lo que hacemos todas las mañanas. Por eso, nunca nos hemos llegado a plantear que quizá estemos cometiendo fallos al hacer el café en la cafetera italiana o en nuestra forma de hacer algo tan sencillo como las tostadas en la tostadora.
Hasta ahora, nuestra única preocupación con este electrodoméstico era no pasarnos con la potencia para no quemar el pan, pero en realidad hemos estado utilizando mal este aparato casi desde el principio.
El truco para hacer unas tostadas perfectas
En todo este tiempo quizá hayas notado que el pan que tuestas queda un tanto seco, o muy pasado o muy poco hecho, y todo se debe a que no les hemos prestado toda la atención al pan. Por suerte, hay un truco con el que las tostadas quedarán perfectamente doradas.
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Dos tostadas saliendo de la tostadora / Javier Zayas Photography
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Dos tostadas saliendo de la tostadora / Javier Zayas Photography
Para empezar, hay que fijarse en si el pan está un poco duro, ya que entonces se hace antes y hay que tener cuidado de que no se tueste demasiado. Otro de los detalles en los que hay que fijarse es en el grosor de la rebanada, ya que cuanto más fina sea, más rápido se hará.
En definitiva, a partir de ahora, fíjate bien en las características de tu pan y, en función de estas, adapta la temperatura de la tostadora. Por ejemplo, si es una rebanada fina y un tanto dura, baja la intensidad.
Así, desde el portal francés Marmiton desvelan uno de nuestros principales errores al usar la tostadora: usar siempre la misma intensidad. Independientemente del tipo de pan, su tamaño, grosor o estado.