Lola Índigo confiesa la pesadilla que vivió rodando el videoclip de La Santa: “Empecé a llorar”
El vídeo, rodado con planos secuencias, fue una auténtica odisea para el equipo

Lola Índigo en LOS40 Music Awards 2022 / David Benito/WireImage (Getty)
Lo reconocemos: estamos totalmente enganchados a La Santa de Lola Índigo. La artista se ha superado con esta nueva canción, dejando claro que El Dragón va a dar mucho de qué hablar. Este último tema es un revienta pistas, invitándonos a bailar desde el primer segundo.
Pero Lola no solo ha puesto tda la carne en el asador en el ritmo de la canción, ¡también lo ha hecho audiovisualmente! Y es que el videoclip de La Santa es un auténtico espectáculo visual. Rodado en vertical (preparado para el consumo directamente desde el móvil) y con una coreografía épica, Lola índigo ha dejado claro que pocas artistas pueden hacer lo que ella hace.
Rodado en un falso plano secuencia, Lola y su equipo de bailarines ha tenido que estar perfectamente coreografiados para conseguir el resultado final.
Lola Índigo desvela cómo fue el rodaje
Ahora, en una entrevista para Luzu TV, Lola ha hablado sobre cómo fue rodar el vídeo. ¡Y no fue una tarea sencilla!
"Era todo un plano secuencia. Estaba coordinado el cámara con todo el equipo de baile para que nadie se choque. Si alguien se chocaba la toma era mala", empieza diciendo Lola Índigo.
La cantante continúa explicando que fue un rodaje duro: "Hubo un momento que hubo llanto. Porque de repente sentí que no iba a salir". La artista continúa expliando que, cuando tiene que pasar por debajo de las piernas de sus compañeras, su cabeza se daba todo el rato con el culo de ellas.
"Quiero que la gente entienda la dificultad. Detrás de las paredes había tres chicos que también eran bailarines y que tenían que entender la musicalidad. Cuando empujaba la pared, tenían que empujarla a la vez", continúa explicando.
El peor momento del rodaje
Lola también ha recordado cuál fue el peor momento del vídeo: "Lo pasé muy mal en el rodaje. El agua estaba congelada y una de mis bailarinas estaba temblando. Y yo ya dije: 'chico, por aquí no paso. O se calienta el agua o no seguimos'. Recuerdo que salí del agua, que tenía los pies morados, y empecé a llorar. Todo el mundo flipando y empecé a decir que 'yo nunca me rindo'".
Sin duda, el resultado del vídeo es impresionante, aunque ahora sabemos lo mal que lo pasó Lola para conseguirlo.