A Meta le caen 265 millones de multa por una fuga de datos de 2021
Expuso los números de teléfono, fechas y ubicaciones de 533 millones de personas.
Mark Zuckerberg no gana para disgustos. Si hace poco tuvo que despedir a más de 11.000 empleados para recortar gastos, ahora la justicia le acaba de dar otro “palo” legal. La Comisión de Protección de Datos (DPC) de Irlanda le ha impuesto a su compañía unos 265 millones de euros tras una filtración de datos en abril de 2021.
Esta filtración afectó a nada más y nada menos que 533 millones de usuarios de Facebook. La Comisión empezó una investigación poco después de los hechos, y en ella se hizo un examen sobre si Facebook cumplía con el reglamento general de protección de datos europeo.
La información filtrada fue publicada en un foro de hackers, e incluía los nombres completos, números de teléfono, ubicaciones y fechas de nacimiento de usuarios de la plataforma Facebook durante los años 2018 y 2019.
En aquel momento, Meta declaró que esos datos se habían obtenido a través de una vulnerabilidad que la compañía arregló en 2019, y que era la misma información que había salido en una filtración anterior en enero de 2021.
Con esta ya van tres veces que el DPC ha impuesto sanciones económicas a la empresa de Mark Zuckerberg este año. En marzo le cayeron 18.6 millones de dólares por un mal mantenimiento de registros en relación con una serie de violaciones de datos de 2018, que expusieron la información de hasta 30 millones de usuarios de Facebook.
Y en septiembre, el regulador europeo también le dio un buen azote económico con una multa de 402 millones de dólares, tras una investigación sobre el manejo de los datos de adolescentes por parte de Instagram.
En resumidas cuentas, que a Meta le han caído casi 700 millones en multas a través del DPC en 2022, y no incluimos los 267 millones a WhatsApp por violar la ley de privacidad de datos el año pasado.
En una declaración obtenida por una reportera del portal Newstalk, un portavoz que no quiso dar su nombre dijo lo siguiente: “Hicimos cambios en nuestros sistemas durante ese tiempo, incluyendo la eliminación de la capacidad de evadir nuestras funciones de esa manera.”
Y añadió que “el ‘raspado’ de datos no autorizado es inaceptable y va en contra de nuestras reglas. Continuaremos trabajando en este desafío de la industria, y revisaremos esta decisión cuidadosamente.”
Esta la cosa como para fiarse de lo que toque Mark Zuckerberg, que a este paso va a tener que acabar pidiendo limosna para pagar todas las multas por filtraciones de datos de sus creaciones.