Britney Spears: cómo la Princesa del Pop cayó en el abismo y renació majestuosamente cual Ave Fénix
Esta es la historia de cómo una estrella internacional del pop perdió el control de su vida y, a continuación, protagonizó un sonado regreso
Britney Spears había tocado fondo y tenía dos opciones: quedarse ahí, hundida, o tomar impulso y ascender. La ‘Princesa del Pop’ eligió recuperar su trono. Dejó atrás sus escándalos personales y, a finales de 2008, protagonizó uno de los regresos más increíbles y sonados del pop. Womanizer, primer single de Circus (su sexto álbum), saltó a lo más alto de las listas estadounidenses y se convirtió en su primer nº1 en casi una década, desde su debut con "...Baby one more time" en 1999. El renacimiento de Britney Spears no había hecho más que empezar. Si bien, la historia de la cantante americana es, esencialmente, una sucesión de regresos.
Un año fatídico
Aunque sus problemas personales y su conducta errática ya venían de atrás y se habían expuesto públicamente, 2007 fue el año de su famoso rapado al cero, cuyas imágenes inmortalizaron las cámaras de 70 paparazzi y dieron la vuelta al mundo. Fue el año del “incidente del paraguas verde”, el de su divorcio de Kevin Federline, el de la lucha por la custodia de sus hijos, el de sus entradas y salidas de centros de rehabilitación.
También, a finales de 2007, publicó su quinto álbum Blackout. Vendió 3 millones de copias, pero al contrario que con sus anteriores discos, sus muy publicitadas ‘locuras’ limitaron su promoción. Tan solo hizo una aparición en los MTV Video Music Awards cantando el single Gimme more. Le llovieron críticas en todo el mundo. Su falta de entusiasmo y su aspecto desorientado eclipsaron la actuación, calificada de desastrosa. Su regreso se desvaneció
La “atormentada estrella del pop”
La situación alcanzó un punto crítico en Enero de 2008, cuando se negó a entregar a sus hijos a los guardaespaldas de Kevin Federline y se encerró en el cuarto de baño con Jayden James. Policía, camiones de bombero y helicópteros llegaron al escenario y la cantante fue trasladada a Cedars-Sinai para evaluar su salud mental. Salió dos días después. Perdió temporalmente la custodia de sus hijos. No le permitían las visitas. Según el jurado, por su “habitual, frecuente y continuo uso de sustancias controladas y alcohol”.
Spears fue admitida en el Centro Médico de UCLA de Los Ángeles para un tratamiento psiquiátrico urgente. Su padre se convirtió en su tutor legal, en el controlador de sus finanzas y de su vida personal. “Atormentada estrella del pop” era la mejor manera de describir a Britney en ese momento de su vida.
Luchando para recuperar el trono
Cuando ya muchos pensaban que era un caso perdido, la princesa del pop luchó para reclamar su merecido trono y recuperar todo lo que había perdido por el camino. Lo hizo al mismo tiempo que iba y venía de los juzgados. A lo largo de 2008, la cantante tenía muchas citas con sus abogados y con la justicia: para recuperar la custodia (consiguió volver a visitarlos), para resolver sus infracciones de tráfico, o para asumir de nuevo el control de su vida y el derecho a tomar sus propias decisiones (a manos de su padre).
Poco a poco, Spears fue retomando su carrera artística. Además de su aplaudida participación en dos episodios de la serie ‘Como conocí a vuestra madre’ (en el papel de Abby), ganó tres MTV Video Music Awards (incluido el de Vídeo del Año por Piece of me), lo que borró la imagen que había dejado en la anterior edición de los galardones. También hizo un documental personal retrospectivo ('Britney: For the Record') que calentó el ambiente ante su inminente y colosal regreso a la industria discográfica.
De nuevo, Princesa del Pop
Britney necesitaba un hit para mantener su relevancia. Ahora se enfrentaba a estrellas emergentes de la talla de Katy Perry o Rihanna, que lideraban la escena musical. Y el contagioso Womanizer (Mujeriego) fue ese hit. El primer single de Circus, que vio la luz en Septiembre de 2008, pasó del nº 96 al nº1 de las listas Billboard (por lo que batió un récord) y fue el primer sencillo de la cantante que lograba el primer puesto en casi una década, desde … Baby one more time en 1999. La canción, calificada por Britney como un himno para las chicas, recibió la aclamación de la crítica y se convirtió en un gran éxito mundial.
Circus siguió la misma senda que Womanizer. Salió el 2 de Diciembre, el día que cumplía 27 años, y entró directamente en el nº1 de Billboard. Por eso, Spears entró en el Guinness de los Records: era la artista femenina más joven con cinco álbumes que debutaban en el número uno. Además, la gira con la que presentó el disco, titulada The Circus Starring Britney Spears, fue una de las que más recaudó de la década (superó los 130 millones de dólares).
Era difícil de creer, pero pocos meses después de caer al abismo, la antaño atormentada estrella, volvía a tener en sus manos el título de Princesa del Pop. La vulnerable Britney se había marchado para dejar paso a la Britney enérgica que todos conocíamos. Finalmente, Britney Spears había resurgido de sus cenizas como el Ave Fénix y le recordaba al mundo que había vuelto para quedarse.
Alicia Sánchez
Periodista en busca de historias chulas del pop