Alba Díaz, la hija de Vicky Martín Berrocal, se despide con lágrimas del lugar que le ha cambiado la vida
Ha vivido una experiencia de un mes que supone un antes y un después para ella
A finales de febrero Vicky Martín Berrocal se despedía con tristeza de su hija Alba Díaz en el aeropuerto. Pero también con alegría porque iba a cumplir uno de sus sueños, ser voluntaria en Kenia.
La hija de la diseñadora y de Manuel Díaz ‘El Cordobés’ ha estado en Mfangno, una isla de aquel país, durante un mes en compañía de la asociación española Indigo que tiene allí una escuela y una casa de acogida.
“He descubierto mi sitio✨ Hace unos meses en un preguntas y respuestas que hice alguien me pregunto si tengo algún sitio donde ir para evadirme y conectar conmigo misma y mi esencia, respirar, analizar y todo ese tipo de cosas. Conteste que no sabría decir un sitio en concreto que me diera tantas cosas a la vez y me evadiera de mi día a día haciéndome sentir la persona más feliz en el planeta, no había dado con el todavía”, aseguraba en sus redes sociales tras vivir esta gran experiencia.
Gran descubrimiento
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“Ahora puedo decir que sí. Esta isla me ha hecho muy feliz y seguramente lo siga haciendo ya que siempre la llevaré conmigo… Gracias Mfangano y gracias a su gente por darle un giro a mi vida”, añadía como despedida del lugar donde ha pasado las últimas semanas.
Pero llegó a su fin y tocó despedirse y no faltaron las lágrimas. "Ha sido de las despedidas más duras de mi vida, sin exagerar. Pero me voy muy contenta de haber vivido este casi mes con los niños y con el resto de voluntarios", compartía en sus stories antes de volver a España.
Y no solo lo ha contado, sino que ha compartido imágenes de ese viaje en las que podemos verla realmente feliz. Ahora le toca adaptarse al contraste de vidas ahora que vuelve a su rutina en el primer mundo.
Jedet, Adrián Roma (Marlon), Teresa Andrés Gonzalvo, Tomás Páramo, Ariadne Artiles o Marta Lozano son algunos de los que reaccionaron con corazones a las imágenes más emotivas de su viaje, eso sí, con los de sus padres al frente.