Connor Cruise, el hijo cienciólogo de Tom Cruise y Nicole Kidman al que hoy no reconocerías
El joven, de 26 años, ha experimentado un cambio de imagen radical en los últimos años
El protagonista de este artículo es otro hijo predilecto de una de las parejas más famosas de Hollywood: la conformada por Tom Cruise y Nicole Kidman en los años noventa. Connor Cruise es, a todas vistas, un gran desconocido por el público generalista. Tiene 26 años y es DJ, pero nunca ha querido dedicarse a la interpretación como otros hijos de celebrities; mantiene un perfil bastante bajo en sus redes sociales a pesar de que es el descendiente de dos de las mayores estrellas de la industria del cine internacional.
En realidad Connor fue adoptado por los protagonistas de Eyes Wide Shut en los años noventa, cuando él era tan solo un niño y la pareja era una de las más queridas y admiradas de Hollywood.
No se sabe mucho de él salvo que es un auténtico aficionado a la pesca –en sus vacaciones recientes en Costa Rica ha publicado varias imágenes a bordo de un pequeño barco posando con ejemplar de lo que parece un gigantesco atún– y que ha seguido los pasos de su padre en la Iglesia de la Cienciología.
De hecho, ser cienciólogo le ha valido bastantes disputas con Nicole Kidman, quien es abiertamente contraria a este movimiento religioso que tantos quebraderos de cabeza le trajo a lo largo de su vida.
Hace años acostumbrábamos a ver a Connor Cruise con su padre en algunos partidos de baloncesto, pero desde hace 5 o 6 años parece que no mantienen una relación tan estrecha. De hecho, una de las últimas veces en las que fueron cazados por los paparazzis fue en 2015 en un partido de baloncesto femenino disputado en Tampa, Florida.
Aquellos días de imberbe juventud han quedado atrás y Connocr Cruise ha cambiado mucho. Ya no tiene una pequeña barbita ni el pelo rastafari, como le gustó lucir durante un tiempo: se lo ha dejado corto y ensortijado y le ha añadido una prominente barba de varios centímetros. Además, ha ganado un poco de peso. Por eso cualquiera que se cruce con él hoy en la calle probablemente no reonocería al hijo de dos de las mayores estrellas de cine de la historia.