Un equipo de ‘Espejo Público’ sufre un intento de atropello al finalizar el directo
El reportero y su cámara se encontraban informando desde Brihuega por otro polémico arrollamiento a un toro
El reportero del programa Miguel Ángel Silva acompañado de Luis Viejo, alcalde de Brihuega. / Antena 3
La localidad alcarreña de Brihuega, en Guadalajara, se encuentra en boca de todos actualmente. Y no por sus famosos campos de lavanda, que se han convertido en uno de los grandes reclamos turísticos de este verano en España. Esta vez, se debe a una nueva polémica relacionada con el mundo taurino.
Hace apenas unos días saltó la noticia del atropello mortal a un toro que se había escapado del encierro que se celebraba en la población. El animal comenzó a deambular por sus calles para después recibir toda clase de golpes y un arrollamiento que acabó con su vida. La actuación ha sido justificada por ciertos sectores como una manera de "acabar con el peligro", pero la gran mayoría coincide en que fue algo totalmente desproporcionado e injusto.
Con el asunto sobre la mesa, son muchos los medios de comunicación que se han hecho eco de la noticia y que han querido contar con la opinión expresa de lxs vecinxs de Brihuega. Uno de ellos es el programa Espejo Público de Antena 3, que desplazó a una parte de su equipo hasta la localidad para charlar de primera mano con sus habitantes.
Justo después de cerrar la conexión
Tras un primer directo desde las calles de Brihuega, que se desarrolló con total normalidad, el reportero del programa Miguel Ángel Silva volvió a aparecer a los pocos minutos en una nueva conexión para denunciar lo que les había sucedido fuera de cámara a él y a su compañero operario. De acuerdo con su relato, ambos se han dispuesto a cruzar la calle cuando "ha habido una persona, que iba en un todoterreno, que ha acelerado y ha pasado muy cerca de nosotros".
Acompañado del propio alcalde del pueblo, Luis Viejo, a quien se disponía a entrevistar posteriormente, el periodista continuaba narrando lo que le acababa de suceder. "El hombre se ha parado a llamarnos mentirosos y con insultos varios", decía, a lo que respondió explicando que ellos sencillamente estaban haciendo su trabajo.
Finalmente ha quedado todo en un susto, aunque más allá de lo puramente anecdótico estamos ante un episodio más en el que una persona totalmente anónima la toma con un reportero de televisión. Una situación que se ha vivido en no pocas ocasiones y que, dada la proyección del medio, siempre acaba exponiendo sobre todo a quien la lleva a cabo.
