Vengadores y X-Men también se enfrentan en ‘Peque Marvels’
Skottie Young llevó el conflicto a su terreno
Los eventos Marvel son uno de los mejores negocios del mundillo del cómic. Cada ‘x’ tiempo, la “Casa de las Ideas” pone en jaque a su propio universo de una u otra forma; tuvimos la Guerra Civil, la Invasión Secreta de los Skrull y recordaréis que hace algunos años dos de los más importantes grupos de superhéroes se enfrentaron en “Vengadores contra X-Men”.
Pues bien, empezara como empezara y acabara como acabara aquella pelea, Skottie Young tuvo tuvo también un proyecto paralelo con el mismo nombre en su particular “Baby Universe”, conocido como ‘Little Marvels’.
En ‘Peque Marvels: Vengadores contra X-Men’, el bueno de Skottie lleva la guerra entre super-héroes al patio del colegio. Sin más argumento que la eterna rivalidad entre dos pandillas de niños, consigue crear un tebeo que leeríamos y compraríamos hasta el infinito.
Capitán América y Cíclope son los dos claros líderes en 'V contra X' (como lo eran en la serie original) y siempre acaban igual. Ya sea jugando a balón prisionero, montando puestecitos rivales de comida para llevar o intentando convencer a los niños nuevos del barrio para unirse a sus respectivas pandillas, el camino de las viñetas nos lleva siempre a una trifulca de escala mayor en la que perdernos visualmente.
Skottie Young se lo ha pasado muy bien dibujando este tebeo. Desde detalles triviales como las flechas de ventosa de Ojo de Halcón, pasando por la casa de Venom, también cubierta por el mismo simbionte o la escena de Namor echando comida en sus peceras, hasta verdaderas joyas como el hijo de El Vigilante (que no puede dormir porque su padre siempre le vigila) o las charlas familiares a la hora de cenar de la familia del Motorista Fantasma, en la que todos los miembros son calaveras flamígeras.
Casi todo en esta versión ‘Peque Marvels’ de ‘AvX’, de una u otra forma, es un guiño a décadas y décadas de superhéroes.
Del dibujo de Skottie Young ya sabéis lo que pensamos (nosotros y medio mundo); no se pueden dibujar mejor los ‘superhéroes-bebé’. Por alguna razón se habrá tirado años este señor haciendo portadas facilonas de bebés para Marvel y vendiendo los originales por miles y miles de dólares.
Un dibujo fresco, único y tan canalla como tierno, acabado con un color excelente de Jean-Françoais Beaulieu.
Panini Comics recopila las cuatro grapas originales de este Peque Marvels en un volumen único de tapa dura con un formato algo más grande que se convertirá en el regalo perfecto para mucha gente. Incluso para los que ya tengan las grapas, que seguro que encuentran alguna razón para volver a comprarlo.