Woody Allen responde al documental en el que se vuelve a sacar el tema de presuntos abusos a su hija

Woody Allen y Mia Farrow formaron una de las parejas de Hollywood más envidiadas durante los años 80 cuando formaban una familia numerosa y compartían películas como Hannah y sus hermanas. Pero las cosas se complicaron cuando llegó la ruptura en 1992.

Fue todo un escándalo porque salió a la luz que el cineasta se había enamorado de Soon-Yi, su hija adoptiva, justo cuando estaba en plena batalla por la custodia de sus hijos, con acusaciones de abusos por medio. Una historia recurrente sobre la que se habla de vez en cuando.

Ahora, se reabren las heridas con Allen v. Farrow, un documental de HBO que recrea aquella historia de la pareja y que recupera las denuncias contra el director por presuntos abusos sexuales a su hija Dylan Farrow que es uno de los testimonios de la docuserie de cuatro capítulos dirigidos por Amy Ziering y Kirby Dick que fueron nominados al Oscar, en 2012, por La guerra invisible.

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Un documental parcial

Allen v. Farrow muestra numerosas entrevistas delante de cámara con testigos, expertos y amigos de la familia que van trazando el timeline de aquellos sucesos a través de películas caseras, documentos judiciales, pruebas policiales y cintas de audio inéditas.

Lo que muchos critican es que la versión que se da es tan solo la de la actriz que termina con un buen lavado de imagen. Algo que muchos han interpretado como una venganza contra el que fue su marido durante doce años.

Ronan Farrow, todo un prodigio que con 15 años ya se había graduado en la Universidad en la carrera de Filosofía y que fue una de las figuras clave en el movimiento #MeToo y antes de cumplir los 30 obtuvo el Premio Pulitzer por sus investigaciones sobre las violaciones cometidas por Harvey Weinstein también aparece. Mantiene su apoyo a su madre y su hermana Dylan.

El que no aparece, sin embargo, el testimonio de Moses Farrow que siempre se ha posicionado de parte de su padre asegurando que aquel polémico 4 de agosto de 1992 nunca estuvo solo con su hermana. Muy crítico con su madre, siempre ha mantenido la vinculación del comportamiento tóxico de Mia con la muerte de tres de sus hermanos.

La defensa de Allen

El cineasta y su mujer han mandado un comunicado a The Hollywood Reporter dando su opinión sobre este trabajo. “Esos documentalistas no tenían ningún interés en buscar la verdad. En cambio, pasaron años colaborando subrepticiamente con los Farrow para crear un trabajo plagado de falsedades", expresan.

Ha vuelto a negar, una vez más, todas las acusaciones. "Como se sabe desde hace décadas, estas acusaciones son categóricamente falsas. Varias agencias las investigaron en ese momento y descubrieron que, independientemente de lo que le hayan hecho creer a Dylan Farrow, nunca se produjo ningún abuso", reza el comunicado.

"Lamentablemente, no es sorprendente que la cadena que emite esto sea HBO, que tiene un contrato de producción y una relación comercial con Ronan Farrow. Si bien esta pieza de mala calidad puede llamar la atención, no cambia los hechos", termina.

Además, en el comunicado acusa al documental de infringir los derechos de autor por incluir fragmentos de su audiolibro Apropos of nothing sin pedir permiso. También afirman que les dieron tan solo unos días para contestar al documental pero que se negaron.