La nueva 3060 Ti de NVidia es una bestia de 399 euros.
Para los que quieren jugar ‘bien’ sin romper la banca.
La última adición a la gama RTX 3000 de Nvidia es la 3060 Ti, con un precio de 399 dólares, llega al mercado ‘ya’ para -imaginamos- desaparecer de forma instantánea como el resto de la serie.
Promete mejor rendimiento que la “tope de gama” de la generación previa (las famosas 2080 y 2080 Super) y, a pesar de quedar lejos del techo técnológico marcado para esta generación, parece endulzar un poquito más la oferta de la 3070, que parecía creada para el juego en 1440p de resolución sin límites de calidad.
Por supuesto, como la RTX 3070, la nueva RTX 3060 Ti también será capaz de mover juegos en 4K si estamos dispuestos a sacrificar pestañas de calidad.
En apariencia, tamaño y forma esta 3060 Ti es calcada a la RTX 3070, incluyendo el doble ventilador que trabaja y consigue mantener la tarjeta fría con un nivel de sonido muy bajo. Viene con un puerto HDMI 2.1 y tres DisplayPort 1.4a y, por supuesto, hace uso también del nuevo conector de 12 pins de Nvidia.
Pese a que el consumo de la nueva gama de Nvidia se ha visto incrementado considerablemente, esta 3060Ti recomienda una fuente de alimentación de 600W de la que se llevará para sí unos 200, cifra modesta si comparamos con la generación anterior de gráficas y con los números que piden la gama alta de la presente.
En juegos, para que os hagáis una idea, esta 3060Ti es capaz de mantener tasas de frames muy altas (casi siempre por encima de 100 frames) cuando limitamos la resolución a 1440p. Pruebas realizadas por The Verge, revelan que esta nueva 3060Ti queda muy cerca de la 3070 en rendimiento, con diferencias de menos de 10 frames entre ellas en muchos de los juegos probados y ambas notablemente por encima de la 2080 con las que también fueron comparadas.
3060Ti, además, hace buen uso de la tecnología Ray Tracing, que es lo que busca todo hijo de vecino hoy en día en el mundo de los videojuegos. Y trabaja también con DLSS, con la que NVidia puede permitirse resoluciones menores para el trabajo duro de la gráfica para después mostrar una señal de una resolución mayor.
Las pruebas en 4K demuestran que también es posible jugar a 60 frames por segundo (y por encima) con esta tarjeta ‘modesta’ de NVidia.
Como veis, si teníais el ojo puesto en el juego en 1440p y en esa flamante 3070 cuyo precio quedaba en torno a los 500 dólares, ahora tenéis un quebradero de cabeza más en la decisión con la llegada de la 3060 Ti, que se sienta en los 400 dólares y ofrece prácticamente el mismo rendimiento que su hermana mayor (aunque con la desaparición de todas las gráficas de las tiendas, más que un quebradero de cabeza es una ayuda que llega del cielo).
Ambas son prueba de que la resolución 1080p ha quedado atrás en el mundo del juego en PC, ambas son bestias del juego en 1440p y herramientas capaces para el juego en 4K si acertáis en la configuración.