‘Señor, dame paciencia’: la película se convierte en serie con otros actores (y dos supervivientes)
Jordi Sánchez salta de Telecinco a Antena 3 para protagonizar la comedia
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Póster oficial de la película / Atresmedia
En 2017, la película Señor, dame paciencia tuvo una buena acogida en las salas de cine, pero los responsables de la cinta no quisieron hacer una segunda parte. Varios años después, sin embargo, sí han visto con buenos ojos hacer una secuela para la pequeña pantalla.
Antena 3 ha arrancado esta semana el rodaje de Señor, dame paciencia, una serie que también contará con Jordi Sánchez como el protagonista principal de esta continuación que ha optado por renovar el reparto con caras nuevas.
"El reparto de la nueva ficción de Antena 3 está encabezado por Jordi Sánchez, que interpreta al protagonista de la historia tal y como hiciera en la película. Junto a él, completan el elenco Rossy de Palma, Norma Ruiz, Carlos Librado, Félix Gómez, Santi Cuquejo, Carol Rovira, Adam Jezierski, Jorge Suquet, Dario Paso, Mafalda Carbonell, Lucía Ramos", explica la cadena en una nota de prensa.
De esta manera, repetirán Jordi Sánchez y Rossy de Palma. El resto de actores de la película no volverán a interpretar a sus personajes en la serie de televisión.
Los capítulos de Señor, dame paciencia serán de 50 minutos y su estreno, aunque no está confirmado, podría producirse el año que viene. También se emitirá en Atresplayer Premium.
Sinopsis oficial de 'Señor, dame paciencia: la serie'
Gregorio es un padre de familia ultraconservador, reaccionario y lleno de prejuicios; un hombre que vive agredido por un mundo en cambio que entiende cada vez menos. Gregorio pasa sus días instalado en la permanente irritación mientras confronta su relación con sus hijos, cada cual más alejado de sus planteamientos vitales. Carlos, casado con Pablo, un aspirante a diseñador; Goyito, sometido a los comics, los videojuegos y los snacks; Alicia, una activista perroflauta; y Sandra, vendida al ecologismo y casada con Javi, un charlatán pirado por la naturaleza.
Gregorio se siente como Job, puesto a prueba por Dios, que no para de mandarle calamidades. La última de ellas, perder su casa y su trabajo como director de sucursal de un banco, quedando en la calle y a merced de la hospitalidad de sus hijos, que no tendrán más remedio que ir turnándose para acogerle.
Para colmo de males, debe afrontar esta etapa sin la ayuda de su mujer, María, a la que echa mucho de menos. Para bien o para mal, María, que falleció en un accidente, se le sigue apareciendo desde el más allá y no cesa de censurar y corregir los exabruptos de Gregorio: lo que sea por conseguir que la maltrecha familia siga unida. Pero es que… si se rompe España, ¿cómo no se va a romper su familia?