Críticas a Hasbro por colocar un botón inapropiado a una muñeca de Trolls
El merchandising no se les ha dado muy bien
Hasbro se ha metido en un buen lío después de que un usuario reclamara explicaciones por una de sus muñecas de la película Trolls. Ya sabemos que el merchandising supone uno de los grandes ingresos para las productoras de cine, pero una mala publicidad como esta le puede pasar factura.
La queja fue seguida de otra, y luego de otra, hasta que 150.000 personas firmaron una petición para que la compañía retirara esa muñeca. ¿Qué le pasaba al juguete? Muy sencillo: el botón de activación del sonido estaba situado en sus partes nobles. Había que pulsarlo para que hablara.
Otros como Sam Parker, candidato republicano al Senado por Utah, han ido más lejos, y han acusado a Hasbro de promover el abuso infantil. "¿Está normalizando Hasbro la captación sexual y facilitando el abuso infantil?", se pregunta.
Después ha compartido otros ejemplos de muñecos "sexualizados" y ha terminado por acusar a Netflix de promover lo mismo con sus productos (tampoco entendemos muy bien la relación). Facebook, por supuesto, ha indicado que muchos de sus enlaces de referencia son falsos y ha prohibido a sus seguidores compartirlos.
Más allá de si la reacción de este senador es exagerada o no, Hasbro ha pedido perdón. Su portavoz, Julie Duffy, explicó al diario The Providence Journal que esta muñeca "estaba diseñada para reaccionar cuando estaba sentada". Después ha añadido que reconocen que "la localización del sensor pueda percibirse como inapropiada".
Finalmente, Duffy ha señalado que el error "no era intencional" y que Hasbro suministraría a sus consumidores una muñeca de repuesto con valor similar si así lo requerían. Además, anunció que el producto sería retirado de las estanterías.