Marc Ros (Sidonie): “Me gustaría ser más capaz de experimentar con las drogas psicodélicas”
Hablamos con el cantante de lo que comparte con los personajes de su primera novela
Marc Ross ha aprovechado el año sabático de Sidonie para embarcarse en una nueva aventura en solitario, la escritura de su primera novela que se publica en papel este 28 de mayo. El regreso de Abba es un regalo para los amantes de lo vintage, las reflexiones vitales y el toque romántico del siglo XIX.
Una historia situada en la Cadaqués más bohemia que nos relata la evolución de la relación entre Abba, Hugo y Doménec. Tres personajes que arrastran unas mochilas que tendrán que dejar aparcadas para ser capaces de sacar adelante el proyecto de componer un disco juntos que quedará recogido en un documental.
El autor ha confesado que casi le cuesta la salud sacar adelante este debut literario pero el resultado ha compensado todo el esfuerzo. Y los que hemos podido leerlo damos las gracias porque no tirase la toalla. Ahora tenemos novela y tendremos álbum y entre uno y otro podemos pasar el tiempo reflexionando sobre algunas cuestiones que nos plantea en el libro.
Sumergirse en el verano de este trío tan peculiar, hace imposible no enamorarse de unos personajes que destilan verdad. Cada uno de ellos contiene un poquito de Ross y ha sido imposible resistirse a la tentación de saber qué características de cada uno de ellos son parte de la ficción o se las han robado a su creador.
Esta pequeña selección nos ha ayudado a conocer un poco mejor a Ross.
Abba: gusto por el nudismo en la playa.
Es totalmente mío. En Cadaqués y en todas partes siempre que me dejen. Cada vez menos porque parece que volvamos atrás. Yo me acuerdo en playas en Menorca donde uno podía bañarse desnudo sin ningún problema y ahora no te sientes tan cómodo porque la gente te empieza a mirar y normalmente suelen ser extranjeros, gente de más al norte de Europa.
Hugo: insomne.
Sí, estoy trabajando en ello y estoy haciendo meditación para dormir al menos cinco horas. Con el confinamiento hay más gente que está con nosotros. Al principio era horrible porque pensaba ‘no voy a rendir, ya verás que desastre’ pero ahora es como ‘he dormido cuatro horas, pero puedo seguir haciendo cosas’. Ya no me obsesiono.
Hugo y Abba: gusto por la gastronomía.
Sí, esto es totalmente mío. No lo dirías por mi aspecto físico, pero sí. No sé cocinar y eso me da una ventaja y es que, cuando salgo fuera, lo disfruto el triple. Cualquier cosa que esté hecha con cariño, aunque sean unos huevos fritos con patatas, ya me flipan. Hago lo básico, hago cocina de subsistencia, fruta verdura, pero no me hagas hacer cosas con salsas y tal porque no tengo ni idea.
Doménec: gusto por la experimentación con drogas.
Me gustaría ser más capaz de experimentar con las drogas psicodélicas que practica Doménec arriesgando con su salud mental, pero yo no puedo hacerlo porque no soy apto y porque soy muy aprensivo y muy hipocondríaco. Y me gustaría ser tan feroz como Abba en los escenarios porque a veces soy muy tímido porque me cuesta abrirme.
Abba: desinhibición para mandar fotos en pleno disfrute de su cuerpo.
Yo tengo una anécdota. Su ex, mandó una foto de su miembro a la persona equivocada y eso me pasó a mí y afortunadamente no se me veía la cara. Y afortunadamente la persona que recibió esa magnífica foto tenía mucho sentido del humor y nos acabamos riendo todos. En el escenario con Sidonie, al principio nos desnudábamos, pero lo hemos dejado de hacer. Había tanta crítica por parte de nuestras familias que, al final dijimos, para no hacer enfadar a nuestras madres, vamos a dejarlo.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...