Blas Cantó: “Ya no estoy escuchando constantemente que canto para un público al que se ningunea”
Hablamos con el próximo eurovisivo
“Estoy en un punto en el que necesito estar conmigo mismo, necesito descansar y necesito volverme a encontrar. Ha sido un año de muchas emociones y mi mente y mi cuerpo agradecerán dedicarme a mí y volver con más fuerza cuando lo haga”. Esto comentaba Blas Cantó poco antes de anunciar que sería el representante de España en Eurovisión 2019.
Pero está claro que una cosa es lo que uno desea y otra cosa lo que los compromisos profesionales te permitan. Le llegó la oportunidad y no la rechazó. Poco antes hablábamos con él de su último lanzamiento: ComplicaDos y le escuchábamos cantar, en exclusiva, su canción Si te vas, en formato acústico.
“ComplicaDos es darme cuenta de que no estoy solo, de que hay mucha más gente como yo por aquí y que somos más complicados de lo que yo creía, cosa que agradezco mucho porque me siento más arropado que nunca”, asegura. Y es que lo de sentirse arropado, es algo importante para alguien que reconoce haber llegado a sentirse solo.
“Creo que son ciclos de la vida, a veces pasa, y por muy rodeado que te sientas, al final, esa sensación de soledad te invade y supongo que la música es en lo que te refugias y por eso salen muchas canciones. No le tengo miedo a la soledad, solo quiero que cuando venga no me haga mucho daño y que pase rápido”, confesaba.
Colaboraciones
Esta reedición recoge los temas de su primer álbum, versiones acústicas y alguna sorpresa más. Y no falta, por supuesto, el tema que supuso un cambio de inflexión, Él no soy yo. “Ahora no canto el Él no soy yo como la cantaba hace un año y medio y no canto No volveré a seguir tus pasos de la misma manera. Creo que es importante redescubrir las canciones para que tengan una vida más larga y saquen de nosotros sensaciones que ni siquiera sabíamos que teníamos”, explica sobre la necesidad de volver a traer esas canciones.
En el disco también encontramos las últimas colaboraciones que ha hecho. Por ejemplo, aparece Marta Soto que reconoce que “ha sido un regalo para mí, una bendición tenerla en mi álbum y en mi vida. No siempre uno tiene la oportunidad de desnudar su alma de una manera tan pura en una canción y, sin duda, le dedicaría muchos bailes de mi vida a Marta”.
También nos encontramos con Scott Helman que, admite que “me ha hecho descubrir una parte de mí que no sabía ni que existía. Ha sido muy divertido hacer esta canción con él y me abre muchas puertas y me abre la mente para seguir creando de otra manera y no tener miedo a probar otros estilos”.
Y como no hay dos sin tres, no falta su gran amiga Beatriz Luengo con la que asegura que “siempre tengo la sensación de que no dejo de aprender. Es como una hermana para mí y al final todo lo que hablamos me hace crecer”.
De ella se ha llevado muy buenos consejos. “Siempre me dice que las canciones que llegan del corazón y bajan a los pies son muy interesantes porque la gente es feliz aunque la canción hable de un desamor, o sea melancólica. He querido seguir ese consejo y por eso he hecho canciones como Si te vas, Él no soy, No volver a seguir tus pasos”, reconoce, “no son canciones tristes, no son canciones para cortarse las venas sino para bailar en las venas y en Las Vegas”.
Superando etapas
Si hay una espina que siempre ha tenido clavada Blas Cantó es que, en muchas ocasiones, la crítica se ha referido con él como cantante para niñas en un tono un tanto despectivo. Es algo heredado de su etapa en la boy band Auryn.
Ahora lo ha superado, ver la variedad de público que le sigue le ha hecho cambiar su visión. “Al principio venía mucha adolescente, aunque también venían muchas familias enteras, lo que pasa es que ahora vienen más y vienen más chicos, vienen más hombres”, comenta.
Eso, al principio, le llamaba mucho la atención “sobre todo porque, durante muchos años, creía que mi música no valía porque ciertos medios o la crítica le quitaba valor por el hecho de que se acercara a un público femenino y adolescente. Cosa que me parece muy machista por parte de los medios porque la música no tiene que tener género ni edad”.
Ahora sigue conservando a ese público pero, “hay mucho más y no estoy escuchando constantemente que canto para un público al que se ningunea. Eso me impacta y es el momento de hacer mucha música y demostrar que la música es para todos y para todas”.
