10 actuaciones para el recuerdo del Mad Cool 2019
De Rosalía a The Cure o Years & Years pasando por nuevos talentos como Jorja Smith o Greta Van Fleet
La cuarta edición del festival madrileño Mad Cool ha concluido sin sobresaltos y con el buen sabor de boca que nos ha dejado haber podido disfrutar de algunos de los mejores directos del panorama internacional. Otro de los puntos a favor fue poder ver sobre el escenario a más mujeres que de costumbre, ya fuera liderando propuestas propias o como instrumentistas de bandas consagradas.
ROSALÍA
Tablas, talento y travesura. Lo de Rosalía no es de este planeta y volvió a demostrar en la Wellcome Party del Mad Cool por qué es la artista del momento. La cantante de Con Altura llegó a congregar a 40.000 personas y consiguió que Madrid se rindiera a sus encantos entonando en catalán Milionària, uno de sus últimos temas incluidos en Fucking Money Man, su lanzamiento más reciente, y demostrando que la música no entiende de barreras.
El respeto por su trabajo fue tal que el público guardaba absoluto silencio durante interludios y partes en las que ella se lanzaba a cantar a capela, como sucedió en Catalina. A su enorme sensibilidad hay que sumar la potencia de su espectáculo: brutal sobre un escenario en el que destacaron su imponente cuerpo de baile y unos visuales increíbles.
TASH SULTANA
El jueves, el escocés Lewis Capaldi se subía al escenario MadIsCool para sudar e interpretar su cancionero ante los asistentes del festival. Era también el día de Ms Lauryn Hill, uno de los iconos del R&B y el hip hop de los noventa que nos dejó un sabor agridulce después aparecer sobre el escenario media hora tarde y ofrecer un show lleno de caras raras e incomodidad. Pero si hubo un nombre de mujer que destacó por su propuesta, su dinamismo y su arroje, esa fue Tash Sultana. La cantante australiana es una auténtica trovadora del siglo XXI, una mujer orquesta, no en vano, se la conoce como "una banda en una sola persona" y es que en el escenario maneja múltiples instrumentos y pedales para crear canciones únicas.
Tash Sultana, una banda en una sola persona. / Javier Bragado/WireImage
IGGY POP
Puntual, aparecía Iggy Pop en su escenario del Mad Cool para hacer todo el ruido posible. Sus 72 años no le pesaron para dar un espectáculo digno de uno de los mejores rockeros de la historia renciente de la música. Arrastraba una cojera que tampoco le impidió despachar con soltura su repertorio, incluyendo por supuesto algunos de sus temas más emblemáticos (The Passenger, I Wanna Be Your Dog...) y darse auténticos baños de masas bajando al foso.
NOEL GALLAGHER
Noel Gallagher apareció arropado por su nueva formación: High Flying Birds, que por cierto toma el nombre de una canción de la banda de rock psicodélico Jefferson Airplane. Toda una declaración de intenciones que busca bucear en las raíces del rock para mutarlo en algo más fresco y sin perder el sello brit. Eso lo hicieron de maravilla, pero para qué engañarnos, la mayoría de sus seguidores se vinieron arriba al escuchar los primeros acordes de éxitos de Oasis. Emblemas del britpop como Wonderwall y Don't Look Back In Anger hicieron estremecerse a los madcoolers.
VAMPIRE WEEKEND
No sabemos qué tienen Vampire Weekend que siempre, absolutamente siempre, son capaces de hacernos bailar y sacudir a la multitud. Su hipnótica percusión (con dos equipos de batería en el escenario), su bajo ultra rítmico y un cancionero de diez, Ezra Koenig y los suyos presentaron en un directo impecable las canciones de su último y genial disco: Father of The Bride y revisitaron algunos de sus hits más incombustibles.
Ezra Koenig y el pop vital y africanista de Vampire Weekend. / Mariano Regidor/Redferns
THE SMASHING PUMPKINS
Las camisetas negras y la estética algo más dark se dejaban ver el sábado en el recinto de Valdebebas. Era el turno de una banda de culto que arrasó en los noventa y que continúa en una forma excelente. Sus melodías incendiarias escondidas bajo capas y capas de guitarras, la inconfundible voz de Billy Corgan (ataviado cual sacerdote del rock) y una puesta en escena brutal sirvieron para que miles de fans volvieran a caer rendidos a sus pies al ritmo de clásicos como Ava Adore, Tonigh Tonigh y nuevos temas como Solara o Knights of Malta.
JORJA SMITH
El sábado Cat Power subía al escenario temprano para interpretar su último trabajo, Wanderer, y algunos clásicos de su discografía. Un escenario más allá, actuaba por primera vez en España Jorja Smith. La cantante y compositora británica es ya una de las figuras más singulares del R&B contemporáneo y presentó en directo su álbum de debut, una delicia titulada Lost & Found.
Jorja Smith, a tus pies. / Mariano Regidor/Redferns
THE CURE
Probablemente, los cabezas de cartel más dignos de Mad Cool. Fue maravilloso disfrutar de más de dos horas de directo de la icónica banda británica. Ser testigos de cómo Robert Smith sigue emocionándose mientras interpreta sus canciones más conocidas varias décadas después. Ofrecieron un directo impecable que sin duda acercó la nostalgia de su musicalidad a las nuevas generaciones entre el público.
The Cure, un directo sanador. / Javier Bragado/WireImage
GRETA VAN FLEET
Estos cuatro veinteañeros de Michigan (tres de ellos hermanos) deben estar hartos de que se les compare con Led Zeppelin, pero es que son la esencia pura de la mítica banda que lideró Robert Plant. Verlos sobre el escenario defender su rock de raíces transformado en algo completamente nuevo, ver cómo devoran y trituran las canciones para devolvérnoslas convertidas en algo único, intangible, indescriptible. Y la energía que desprende su frontman, Josh Kiszka, además del rollazo que tiene sobre el escenario, dejó al público impactado. ¿De dónde han salido estos chavales y por qué llevan tanto rock en las venas?
Josh Kiszka y Jake Kiszka de Greta Van Fleet, revisitando el rock en 2019. / Mariano Regidor/Redferns
YEARS & YEARS
El grupo de Olly Alexander es siempre una fiesta sobre el escenario. No hay melodía que se les resista y eso lo sabe muy bien su púlico, que lo apuesta todo al baile y a pasar el mejor de los ratos posibles. El de Years & Years fue uno de los shows más dinámicos y divertidos del festival, y pese a la gran responsabilidad que entraña, el trío británico salió victorioso.
