Natalia Lacunza: “Ahora estoy viviendo como en una segunda Academia porque vivo con algunos de mis compis”

El pasado viernes Natalia Lacunza presentaba, por fin, su primer single tras salir de Operación Triunfo. Había mucha expectación y su elección de un tema desnudo y de sentimiento, parece que ha sido todo un acierto. Nana triste no es la canción más alegre para el verano, pero sí la más emocional.

“Habla del momento en el que tienes que decir adiós, o despedirte, o deshacerte de algo de tu vida a lo que quieres mucho pero que sabes que te está haciendo año y sabes que tienes que seguir”, comentaba en YU sobre el tema.

Puede que no fuera el single que mucha gente estaba esperando pero ella lo decidió así: “Nana triste es una cosa super desnuda, super austera, con una producción super sencilla, la canción más cercana de todas y quería que fuera la primera porque me apetecía salir con algo sencillo. Si te tengo que enseñar algo, primero prefiero que sea algo sencillito que digas ‘vale, aquí te veo tal cual, sin mucha parafernalia’”.

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Ahora toca prepararse para Otras alas, su primer EP, que saldrá a la venta este próximo viernes y que según la cantante, traerá “cosas muy distintas. El resto del EP es totalmente distinto, he ido al revés. El resto de producciones son bastante tochas. Son 6 canciones más, bastante distintas entre ellas y cada una producida por un equipo de gente distinta y eso me ha hecho aprender un montón”, aseguraba.

“No sé si va a gustar, o no, pero a mí me encanta”, afirmaba sobre el resultado final. Tras salir de la Academia se ha encerrado a trabajar, pero todavía recuerda cómo fue salir del concurso televisivo.

“Lo que más tengo grabado en la cabeza es cuando volví a casa después de grabar la gala de Navidad, que encima me puse enfermísima, tuve muchísima suerte porque el día de Navidad estaba con pulmonía, en plan fatal. El primer día que me levanté en mi casa, me desperté y vi una fotografía enorme mía en el periódico y fue como ‘¿qué pasa?’ y no sabía cómo sentirme al respecto”, recordaba sobre aquellos primeros momentos de popularidad.

“Es como una hostia gigante. Te quedas como con pajaritos así y todavía los tengo, pero trabajar ayuda porque centras tu energía ahí”, explicaba sobre dónde ha encontrado el punto de apoyo para asimilar ese desequilibrio emocional que provoca una experiencia como esta.

“Ahora estoy viviendo como en una segunda Academia porque vivo con algunos de mis compis y estamos realmente casi todo el día juntos, todos. Me gusta más ahora porque estamos más libres, a nuestra bola”, desvelaba.

Su paso por YU dio mucho más de sí, no tienes más que darle al play para ver qué tal se le dan los juegos de Aníbal Gómez.