Fangoria, Vetusta Morla, Rozalén, Dani Férnández, entre otros, nos hicieron gozar en el Interestelar de Sevilla
40.000 almas vibraron con las propuestas del festival andaluz en su cuarta edición
La cuarta edición del festival Interestelar sigue marcando tendencia y abarcó durante el pasado fin de semana la pradera sevillana del CAAC, que hizo hueco a más de 40.000 asistentes, quienes tenían 3 escenarios para saltar de alegría y una carpa Obbio que albergaba dj´s barnizando temazos non-stop en un festival que es una de las citas imprescindibles de la ciudad andaluza. Dos jornadas, sin ningún descarte entre tantas propuestas, pero donde, como siempre, hay que elegir por una buena causa, LA MÚSICA. Y esto fue lo que ocurrió...
Arrancaron con el septeto La Maravillosa Orquesta del Alcohol, que en vez de ser Héroes del Sábado como en su canción, lo fueron del viernes con un arrollador directo para empezar a festejar la cita que teníamos por delante.
La carismática Zahara, que aplica la emoción como nadie con su sútil voz, era uno de los nombres más esperados, partía como favorita de la jornada y con La bestia cena en casa como tremendo tema señalado de la gran actuación que marcó, con su infinito y contagioso baile incluído, una reacción de lo más emocionante poniendo el escenario patas arriba. También hubo rescates de su disco Santa, que está coproducido por ella y Sergio Sastre (Miss Caffeina).
El sello del inigualable Iván Ferreiro, sobrellevó una vez más el directo demostrando que está más que curtido en estas batallas y que nunca hay dos noches parecidas junto a él, revisitando temas de Los Piratas (uno de los grupos más legendarios que ha tenido este país en las últimas décadas y que él capitaneó durante trece años) que alternó sin parar con una batería de canciones de sus discos en solitario, como ese gran hit que es "Turnedo" y que no podía faltar.
También nos acompañó Dani Fernández, que ya mostró en redes sociales su especial entusiasmo por formar parte del festival, presentó "Incendios", su primer trabajo en solitario tras la ruptura de la banda, que, como contó, surge de una etapa personal con complicaciones, y cumplió todas las expectativas.
Rozalén sigue cumpliendo sueños, y si tuviéramos que hacer un resumen/análisis de esa noche, la palabra clave sería "consagración", donde mil voces a una coreaban sus canciones, abanderando la emotiva Girasoles o 80 veces como si se teletransportasen al escenario con la cantautora, que saboreó las mieles del esfuerzo, y dedicación con un enhorabuena en mayúsculas.
El estallido de los murcianos Second resultó encantar a todos. Es imposible no caer rendidos ante ellos, así que no podéis dejar pasar temazos como Rincón Exquisito o Muérdeme, con los que llevan tiempo triunfando, siendo capaces de firmar auténticos himnos con los que cantar y bailar.
Con Mueveloreina, el festival cedió autonomía al trap. Presentaron Tiki Tiki, Vivas y parecía que se lo estaban pasando mejor que nunca, siendo entretenidos, que siempre se agradece, y ostentando el título de descubrimiento del festival para muchos.
Sobran razones para querer ver a Fangoria sobre un escenario. Si Alaska y Nacho Canut acordaron previamente hacer un conciertazo, lo consiguieron. Cumplieron la máxima de hacer a los demás tan felices como quieres ser tú mismo. Cercanía entre el público que acabaría con las gargantas destrozadas por setlist donde se removían De qué me culpas (que más que un temazo rompepistas podría elevarse a la categoría de "EL TEMAZO", que te hace despegar), Iluminados, Dramas y comedias, o A Quién Le Importa, que lograron con una puesta en escena a base de un cuerpo de baile y realidad paralela hasta con caretas del famoso logo del acid house. Su último álbum, donde se atreven a versionar a OBK o KU MINERVA, es otra muestra de la potencia de Fangoria, que, como pocos, han sabido consolidarse encontrando la fórmula perfecta disco a disco. Un cierre de lujo para ese escenario.
Carmen Boza, quien sin duda fue un muy buen inicio para el segundo día de festival, enganchó al público con sus temas. Gran hermano huele a temazo desde el primer acorde, y su último trabajo, La Caja Negra, merece que le prestéis atención. Ya sea en vivol o en casa, con los cascos. El donostiarra Mikel Erentxun, que tantas veces ha encabezado la lista de LOS40 a lo largo de las últimas décadas, hizo un virtuoso repaso de sus discografía en solitario y materializó sobre el escenario que su último trabajo, El último vuelo del hombre bala, es toda una garantía. Es un grande que siempre nos deja con ganas de más, y es que del ex-vocalista de Duncan Dhu no escatima y siempre esperamos lo mejor en sus directos, en los que junta a todo tipo de generaciones distintas.
Cuando apareció Depedro, tuvimos el sentimiento de de sentirnos sabedores de experimentar un rato épico, por sus letras, por lo que nos cuenta, por sus historias que saben distintas en cada momento. Y porque a estos festivales también se viene a descubrir música nueva, y conocer por vez primera al excomponente de La Vaca Azul fue toda una suerte para muchos. Toteking y su hermano menor Shotta el día anterior fueron la nota de rap del festival. Ambos son todo un referente del género en este país, y se hicieron su gran hueco entre la galería de pop e indie del cartel para gusto del recinto.
Vetusta Morla se está convirtiendo en una banda insuperable. Era uno de los grandes reclamos del festival y lograron atrapar haciendo que sucediera un concierto extraordinario, por el que desfilaron sus temas de una manera tan ascendente como su trayectoria, como si nos los estuvieran tatuando en nuestros oídos. Y todos quedaron satisfechos, como si estuvieran en el Mismo sitio, distinto lugar, título de su último disco, revelándose como el plato fuerte del elenco del sábado.
Y leído esto, la mayor ovación en esta aventura recae un año más en la organización, ya que The Music Republic y su troupe se merecen ser nombrados como fundamentales cabezas de cartel.