Las caricias fantasmas y otras tres historias que te dejarán helado
Los andayeros se sinceran y nos cuentan las historias paranormales más surrealistas
undefinedLuis M. Ortiz
¿Te ha pasado alguna vez algo paranormal? ¿Crees que algo así podría ocurrirte? Escucha estas historias de andayeros porque, aunque te cueste creer en esto, te vas a quedar flipando con lo que cuentan y cómo lo hacen. ¿Te imaginas que te pasara algo así?
- Amelia nos ha contado que hace unos años fue al pueblo de Belchite en Zaragoza y, aunque ella no creía en nada de esto, se quedó flipada. Asegura que escucharon un montón de ruidos que no esperaban: ''Escuchamos de todo: un avión sobrevolar, campanas sonando, gritos... Todo de madrugada''.
- Cuando Coral tenía 12 años y se iba a lavar los dientes le pasaba algo extraño... ''Yo dejaba el grifo abierto mientras me lavaba los dientes y veía cómo se cerraba solo. Veía la rosca moviéndose''.
Pero la cosa no se quedó ahí... Siguieron pasándole cosas raras. Con el tiempo empezó a notar algo raro: ''De vez en cuando, noto caricias en la piel''. ''Noto en la cara que me dan una caricia, como fresquito y es incluso agradable''. Coral no tiene ni idea de lo que puede ser, pero sí nos ha hablado de un amigo de la familia que se suicidó... Ella lo relaciona con él, pero nunca ha podido comprobar nada.
Y, para terminar, escucha bien esta historia porque vas a flipar.
Antonio es osteópata y estaba en su consulta esperando a los pacientes. Llegaron cuatro personas juntas y dos le pidieron ir al aseo antes de empezar la consulta. A los pocos minutos volvió solamente una persona.
Él al principio pensó que tardaba un poco más y ya está, pero al poco acabó preguntando por ella: ''Yo les dije: - Oye, igual le ha pasado algo a la otra señora, que está tardando mucho'. Y ellos me respondieron: - ¿Qué señora?''. Antonio les explicó que él había visto a cuatro personas entrar y a dos irse al aseo, pero le aseguraron que solamente entraron tres personas a la consulta: ''Ahí fue cuando me dio un bajón y me puse hasta rojo, pero estaba deseando preguntarle a mi mujer si ella también la había visto''.
La mujer de Antonio le dijo que ella solamente había visto entrar a tres personas y, a día de hoy, después de muchos años de lo ocurrido, Antonio sigue sin encontrarle una explicación lógica. Él está seguro de lo que vio y nunca logrará olvidarse de esa misteriosa señora.