¿Pueden convivir tus mascotas y tu hijo?
Las claves para que tu casa no sea un caos
undefinedLuis M. Ortiz
Ponte en situación. Tienes un perro y le quieres muchísimo. Lleva un montón de años con vosotros y todo va genial. Sin embargo, llega un punto en el que la familia crece y sois uno más en casa.
Aquí pueden pasar dos cosas: o bien cuajan, tu mascota acepta al bebé y se llevan bien, o bien todo lo contrario. El animal se queda sorprendido por la llegada de un nuevo miembro a la manada y empiezan los celos.
La cuestión es: ¿qué haces si pasa la segunda opción? En este tema no se puede dar una respuesta categórica porque cada casa es un mundo. Y cada cual decidirá qué hacer con su mascota, pero quizás estos consejos puedan ayudarte un poco.
- Prepara a tu mascota. Antes de que el bebé nazca intenta que la mascota entienda que va a llegar alguien. Que huela la ropa con la colonia que le vais a poner, sería una buena idea.
- Preséntalos de manera natural. Cuando el peque llegue a casa muéstraselo con naturalidad. Preséntalos y que mantengan un poco de contacto.
- No ignores a tu mascota. No le hagas sentirse fuera. Intenta seguir comportándote con él como hasta ahora. Si ve que ahora las preferencias han cambiado, podría tener consecuencias negativas para el bebé.
- Enséñale al niño. El peque tiene que aprender que si él es brusco, el perro o gato pueden asustarle o hacerles daño. Así que, tiene que entender que debe respetarle. Jugar con él pero respetarle.
- Vigila siempre cuando estén juntos. Ten en cuenta que es un bebé y que no tiene ninguna capacidad de defenderse. Y el animal sigue siendo un animal así que puede ser que en algún momento reaccione de manera rara. Tienes que estar siempre pendiente y vigilando.
Esto no es ninguna fórmula mágica, pero seguramente pueda ayudarte a que la relación entre tu animal y tu hijo sea mejor. Así que, poco a poco y mucha paciencia.