¿Quieres tener éxito como Vanesa Romero, Patricia Conde o Ana Mena?
16 ingredientes para conseguirlo
Daniel de la Peña es un hombre de medios y literatura que ha encontrado la manera de alcanzar el éxito con una receta que ha decidido compartir con todos a través de Triunfadoras 2.0, la segunda parte de un proyecto que trata de acercarnos a mujeres que han sabido llegar alto por méritos propios.
El aragonés ha entrevistado en esta ocasión a profesionales tan diferentes como Vanesa Romero, Macarena Gómez, Edurne, Ana Mena, Gemma Mengual, Dafne Fernández, Patricia Conde o María Gómez. Un total de 16 mujeres con una historia que contar.
Y, en esta ocasión, se la cuentan a él, un hombre que ha encontrado en el género de la entrevista un camino para conocer mejor a la gente, eso sí, desde el punto de vista más políticamente correcto.
La mujer como protagonista, ¿es diferente el éxito para hombres y mujeres?
No es diferente, la diferencia está en cómo se llega al éxito. Está demostrado, yo lo sé por amigas y familiares, que habéis tenido más frenos a la hora de poder alcanzar una meta. Hoy en día se va equilibrando. Lo diferente no es el éxito sino como se llega al éxito que vosotras os lo tenéis que currar muchísimo más.
¿Podríamos considerarlo un libro de autoayuda?
Totalmente. No es sólo un libro para mujeres sino un libro de autoayuda para alcanzar el éxito sabiendo que lo principal es quererte a ti mismo para alcanzar lo que quieres en la vida.
¿Y lo firma una persona que considera que ha alcanzado el éxito?
Yo creo que sí, me ha costado lo mismo porque a veces pensaba que era otra cosa. Al principio creía que el éxito era triunfar siendo un escritor y llegó a ser obsesivo y con el primero y el segundo, como es lógico, fueron pequeños pasos pero ahora no me obsesiona si soy número uno, ni las ventas, sino ser un escritor reconocido sino pasármelo bien, así que, sí, creo que he conseguido el éxito.
¿Crees que todos buscamos éxito?
Sí, si no sería muy aburrido. Éxito entendido como ser realmente como quieres ser. Todo el mundo quiere ser feliz y eso también es el éxito. Creo que se considera el éxito como ser famoso y no, hay mucha gente famosa que no es feliz. Si quieres ser panadero, lucha por serlo, si quieres ser mamá, si quieres tener una vacaciones que siempre has deseado en Lisboa (como es mi caso)… todo el mundo va buscando el éxito.
Planteas la receta del éxito con 16 ingredientes, ¿cuál es para ti el más complicado de conseguir?
La paciencia. Es algo que me ha costado mucho tiempo y ahora la cultivo más. Tengo mis brotes de querer tenerlo todo ya porque la paciencia es super complicada de conseguir porque vivimos en la cultura de que lo queremos todo para ya, o para antes de ayer, y cuesta cambiar el chip. Pero una vez que se consigue, todo va llegando rodado.
- 16 ingredientes para el éxito (by daniel de la peña)
¿Cuál es la mayor enseñanza que has sacado tras hablar con estas mujeres?
Que al final la vida te va dando esos caminos que no sabías que estaban allí. En común tienen que han conseguido lo que quieren pero han sabido ser flexibles si la vida no les llevaba hacia un lado en concreto. Eso me ha dado mucha tranquilidad. Por ejemplo, Vanesa Romero, estaba super perdida en la vida hasta que encontró la interpretación y se dio cuenta de que era lo que quería hacer en la vida.
Que por cierto le preguntas por sus inicios sin detenerte en su paso por 40TV, eso te lo tengo apuntado.
No lo sabía y me documenté un montón. Pero me parece super chulo, hubiera sido interesante.
“Disfruta de tu camino al éxito”, ¿ese es el mantra que deberíamos repetirnos todos?
Me acuerdo que en el primer Triunfadoras lo pasé mal entre comillas porque solo pensaba en que el libro tenía que funcionar. Si el camino al éxito no es divertido o sufrimos más de la cuenta es un error.
¿Qué criterios seguiste para elegir a estas mujeres y no a otras?
Había muchas que me apetecía de una manera brutal como Vanesa Romero, Patricia Conde, Edurne… y sobre todo por tener un feeling de admiración hacia ellas. A Ana Mena la descubrí con el primer single y me hacía ilusión entrevistarla y hablar de lo que está consiguiendo ahora. María Gómez me gustaba muchísimo como profesional. Un personaje, si no me cae bien intentaré no entrevistarlo para un libro.
Muchos dirían que partir de esa admiración te resta objetividad a la hora de hacer las entrevistas.
Sí, no te voy a mentir (risas). Yo quiero plasmar mi visión y ligar cada entrevista a un ingrediente del éxito y yo creo que se pierde objetividad pero no realismo porque todo está ligado a hechos reales.
Dejas claro que la entrevista es el género que más te engancha, ¿qué te aporta?
Aprender un montón. De mi madre, de mi abuela, de mis amigos, yo creo que cuando más aprendo es hablando y empapándome de lo que me cuentan. Yo creo que se estila muy poco a nivel literario pero me aporta mucho conocimiento. Me lo paso pipa.
¿Recuerdas cuál fue tu primera entrevista?
Sí, no la olvidaré nunca. Fue en Zaragoza a Beatriz Luengo que acaba de salir de Un paso adelante. Estaba su jefa de prensa que era super seca y me rescató Beatriz. Yo le preguntaba mucho por la serie pero había sacado su disco en solitario y su representante fue en plan: ‘Oye, vale ya de preguntar por Upa Dance…” y Beatriz le dijo ‘deja al chaval que haga su entrevista’. Y menos mal porque era mi primera entrevista cara a cara.
Una de las cosas buenas de este género es que te permite acercarte a los personajes y romper estereotipos. ¿Cuál es el personaje que más diferente encontraste a como te lo habías imaginado?
Mónica Naranjo. Podía haber un poco de idealización por el tema de la música, que parecía una diva descomunal y un poco antipática, siempre se había dicho, y yo creo que es una de las mujeres más cariñosas, por lo menos conmigo, más sensibles y más generosas… además de entrevistarla, le propuse que me hiciese el prólogo de una novela y no dudó en hacerlo. Parecía seria, distante y fría y es todo lo contrario.
¿Y de este libro?
Sonsoles Ónega. Siempre me ha parecido una mujer muy seria y es super divertida, me lo pasé muy bien con ella. Cuando apagas la grabadora, mucho más todavía.
¿Cuál ha sido tu entrevista más complicada?
Gloria Estefan, me tiré dos horas esperando porque en lugar de gestionarlo por prensa lo hice por el club de fans. En Las Ventas de Madrid, dos horas esperando, que yo me apetecía ni entrevistarla. Y cuando saco la grabadora, dos gorilas que eran sus guardaespaldas se me llevan para no grabar nada y Gloria Estefan, con lo chiquitaja que era, parecida a Beatriz Luengo, me agarró del brazo y dijo, ‘ven aquí que vamos a grabarlo’. Lo pasé fatal.
¿Y la que más has disfrutado?
En este libro me lo he pasado super bien. Como mínimo te tendría que decir tres. Con Ana Mena, fue super cariñosa y fue muy sincera. Con María Gómez me lo pasé en grande, que fuimos a Cuatro a entrevistarla. Y con Patricia Conde que también me rompió moldes, la vi una mujer muy espiritual con los pies muy en la tierra, me cayó muy bien. Además, con ella grabé unos 40 minutos y cuando fui a transcribirla me di cuenta de que no se había grabado y tuve que repetirla y buen incluso mejor porque había más complicidad.
En el tema entrevista hay grandes referentes televisivos: Mercedes Milá, Risto Mejide, Bertín Osborne… ¿con cuál te identificas más?
Me encantaría identificarme más con Risto porque creo que tiene más narices que yo. A veces soy un poco políticamente correcto, cada vez menos, pero me da un poco de envidia sana. Con Bertín Osborne, ni de broma. Con Joaquín Prat, del programa de Ana Rosa, me identifico porque le da un toque muy humano a todo.
Una de las cosas a las que no debemos renunciar son los sueños: ¿Cuál es la entrevista que te gustaría hacer?
Ricky Martin, pero ya no tanto por el tema musical, que también aunque últimamente va mucho al reggaetón, sino por el tema humanitario. Yo creo que lo ha pasado muy mal y ha sabido enfocarlo de una manera altruista y enfocando una carrera como quería.
¿De qué va la vida para ti? (es la pregunta que hace Silvia Congost, la mujer que escribe el prólogo)
Va de estar con la gente que quieres, de trabajar y pelear por algo que te apasione e intentar ver el lado bueno de todo.
Les preguntas a las entrevistadas cuál es el lugar que escogerían para hacer la entrevista. En tu caso, ¿cuál sería?
Ahora mismo cualquier lugar con costa. Y si no la plaza de los sitios de Zaragoza. Allí me llamo uno de los responsables de Anaya para decirme que apostaban por el libro.
Cristina Zavala
Periodista enamorada de todo el entretenimiento. Enganchada a la tele, los libros, los últimos lanzamientos...