Drew Barrymore se deja ver con 10 kilos menos
Sueña con comer pizza pero se mantiene fiel a la dieta, de momento...que llega la Navidad
Drew Barrymore tiene una pequeña adicción por la comida basura y, por eso quizás, en los últimos tiempos había dejado de lucir la figura esbelta a la que nos tenía acostumbrados. Pero, como vive en un mundo muy esclavo, le ha puesto remedio y se ha sometido a una estricta dieta para que no se hable de sobrepeso, aunque, para ser sinceros, nosotros la veíamos estupenda antes de someterse al régimen, ¿o no?
El caso es que ha perdido diez kilos desde que hizo su última aparición pública. Sorprendía con nueva figura hace unas semanas en una gala benéfica en la que coincidió con Katy Perry. Ahora, ha explicado que ese cambio físico se debe a que está siguiendo una dieta. “Me siento muy bien. Seguí el método de Kimberly Snyder pero le agregué algo de proteína como pescado y pollo porque ella hace todo vegetariano o vegano”, explicó en US Weekly. Pero no ha sido fácil, “todo lo que hice fue llorar y soñar con pizza. Todavía lloro y sueño con pizza”, reconoce.
Lo que le ha ayudado a perder esos kilos es un régimen coreano basado en la comida tradicional asiática que elimina grasas saturadas y alimentos procesados. Todavía lo sigue aunque tiene claro que ahora que se acerca Navidad, se tomará algunas licencias. “Las fiestas de Navidad están cerca así que, voy a disfrutar algo”, admitía.
Y ya que hablamos de Navidad, ella lo tiene claro, no le gusta alimentar el consumismo en sus pequeñas Olive y Frankie. Ella lo tuvo todo de pequeña y tuvo graves problemas con distintas adicciones. No quiere que a sus pequeñas les ocurra lo mismo. “Creo que la clave está en los regalos personalizados”, explicó en People.
No es de las que apuestan por los juguetes con los que nos bombardean en los anuncios. “En lugar de comprarles juguetes convencionales, porque obviamente soy cautelosa en ese sentido, les compro mucho arte y artesanía”, reconoce, “este tipo de cosas están más dirigidas a compartir y les invita a crear. Creo que esta perspectiva es mucho más apropiada porque les anima a inventar y algo hecho de propia mano es siempre el mejor regalo”.