¿Serías capaz de vivir con una sola camiseta?
El minimalismo extremo llega desde Japón y es la última tendencia

Acostumbrados como estamos a renovar nuestro armario prácticamente cada temporada, a acumular ropa que luego no tenemos tiempo de ponernos y amontonar zapatos que ni recordamos tener guardados en el armario, era cuestión de tiempo que el mundo se rebelara contra este consumismo extremo. Desde Japón llega una nueva tendencia que aboga por, precisamente, todo lo contrario. Pocas prendas de ropa, pocos muebles y, en general, un consumo reducido al mínimo.
El motivo no es, aunque pudiera parecerlo, el limitado espacio del que disponen los nipones en su hogar. Se trata, más bien, de un compromiso ético con el mundo que nos rodea. El gasto energético que supone confeccionar una sola prenda de ropa, por poner un ejemplo, es inmenso y más lo es si lo multiplicamos por decenas. Por ello, los pioneros en esto del minimalismo extremo invierten en una prenda de cada, de calidad, y se permiten la locura de tener un par de mudas de ropa interior.
Incluso los muebles de casa se ven reducidos al mínimo y se opta por piezas con varias funcionalidades. La mesa del comedor sirve como lugar de trabajo y las butacas sirven también como sillas. Puede parecer una locura más los japoneses pero es una realidad que pone de manifiesto la cantidad de cosas que tenemos y que no utilizamos.