Es espectacular cambio (o no) del niño de Hermanos y Detectives
Rodrigo Noya protagonizó esta comedia policiaca de Telecinco junto a Diego Martín
Bienvenidos, una vez más, a esta sección (¿?) de televisión en la que os hablamos de aquellos actores que todos conocimos siendo unos niños, que desaparecieron de nuestras vidas con la conclusión de sus series y que, años después y contra todo pronóstico, han crecido, les ha salido barba y aparentan ser unas personas de veintipocos años.
Esta vez toca hablar de Rodrigo Noya, el pequeño actor argentino que protagonizó con 14 años -aparentaba menos- la comedia policiaca de Telecinco Hermanos y Detectives. Esta serie se emitió entre septiembre de 2007 y agosto de 2009, con dos temporadas que contaba la historia del inspector de Policía Daniel Montero (interpretado por Diego Martín), un tipo meticuloso en sus investigaciones, que un buen día recibe la visita de su hermano pequeño argentino, al cual ni conocía.
Ese pequeñín es Lorenzo que, al quedarse huérfano, decide cruzar el charco para irse a vivir con la única familia que le queda, Daniel. El contraste entre ambos es total. Sus vidas cambian de la noche a la mañana y Daniel verá como Lorenzo -tan superdotado como repelente- se terminará convirtiendo en su mejor aliado para resolver los crímenes más complicados. La habilidad de este niño para atar cabos sueltos y encontrar pistas es propia de Sherlok Holmes.
La serie, que sin ser un prodigio tenía su punto, era una adaptación de la argentina del mismo nombre y que también protagonizó Rodrigo. Y es allí, en la tele argentina, donde Rodrigo ha desarrollado la mayor parte de su carrera como actor. Eso explica que tras la conclusión de Hermanos y Detectives, en España le hayamos perdido la pista.
Ahora, diversos medios digitales lo han vuelto a traer a nuestras vidas a cuenta de su espectacular cambio físico. Espectacular… o no tanto. Porque lo cierto es que mirando sus perfiles en Twitter o Instagram, Rodrigo se parece mucho a aquel niño que era en su etapa de Hermanos y Detectives. Evidentemente, ha sufrido los cambios físicos que cualquier ser humano padece en la adolescencia.
Sea como fuera, nos gusta comprobar cómo han cambiado los actores y actrices niños con los que crecimos. Una rara mezcla entre nostalgia y cotilleo…