Las separaciones más sonadas del mundo de la música
Todo tiene un principio y un final, aunque siempre queda pensar que nunca nada es definitivo
Una de las separaciones más dramáticas de la historia fue la de los Beatles. "La culpa de todo la tiene Yoko Ono" gritaban las seguidoras a la puerta de los estudios discográficos Apple cuando se enteraron de que el disco Let it be iba a ser el último. El 10 de abril de 1970 murió una de las bandas que todavía cuenta con el mayor número de seguidores.
The Police, conjunto de himnos como Every Breath you Take , Roxanne o Message in a Bottle, hizo su última gira en 1984. Nunca hubo un comunicado que hablase de disolución, solo lo dejaron pasar, sus canciones ya tenían tanta fuerza que nunca se supo bien si el grupo dejó en algún momento de tocar.
En el 96 se vivió una de las separaciones más trágicas para el mundo fan. La agrupación inglesa Take That cesaban de tocar juntos en marzo de ese año después de que Robbie Williams les abandonara para probar suerte en solitario. Gritos, lloros y valerianas eran el continuo de muchas adolescentes de la época que no sabían como sobrellevar tal desastre. Parecida fue la situación vivida por las Spice Girls, una de las chicas picantes, Geri Halliwell, dejó al quinteto sin pelirroja y un álbum después desaparecieron. Pero no todas las veces que uno de los integrantes abandona el grupo éste acaba rompiéndose y no hay que irse muy lejos para conseguir ejemplos ya que hace poco hemos visto como la Oreja de Van Gogh cambiaba de cantante, al igual que Presuntos Implicados y cómo el Canto del Loco prescindía de su batería.
Grupos de habla latina como Héroes del silencio, Tequila o Nacha Pop son otros que dejaron huérfanos a muchos tras su separación que cambiaron por 'individualidades' momentáneas.
Y como podéis apreciar todos estos grupos, históricos de la música, han vuelto en alguna ocasión para transportarnos al pasado en conciertos de resaca trasnochada. No todo final es para siempre y toda banda tiene su momento. Hay que aprender que lo bueno si es breve, dos veces bueno, además, siempre habrá tiempo para que, si las cosas no van tan bien, sorprendernos con algún 'revival' que nos recuerde tiempos mejores.