Animales minimalistas
Jack y Meg White, The White Stripes, acaban de lanzar un nuevo disco, <i>Get behind me Satan</i>, acallando así los rumores de una presunta desintegración de la formación
"No somos la típica banda que un día echa al bajista y otro recluta a gente nueva". Declaración de intenciones, que hasta ahora han cumplido a raja tabla, muy acorde con el minimalismo conceptual de su música. Rara vez han admitido alguna colaboración, y casi nunca en sus directos. Parece que así será por los tiempos de los tiempos. "Tengo muchas ideas que plasmar en nuevos disco", asegura Jack, líder indiscutible del dúo.
Porque sus canciones, además de ese par de instrumentos y la voz del solista, no tienen más. Así entienden su música. Consideran que sus composiciones son más intensas de esa forma, aunque a veces han echado mano de un piano, como en su nuevo álbum. También persiguen ese objetivo en las grabaciones: semana y media en el estudio... y dan por finalizados los discos. A canción por día, más o menos.
Meg y Jack utilizan una estética retro sureña estadounidense basada en el rojo y blanco, mezclados con el negro. Juegan con la imagen de los caramelos y piruletas rayados de toda la vida. También el nombre del grupo hace relación a ello.
Los datos dicen que se casaron en 1996 y que lo dejaron cuatro años después. Estuvieron un tiempo jugando a que eran hermanos 'cariñosos', y cuando dejaron de hacerlo, la leyenda ya había calado. Siguen siendo amigos, como Jack de Renée Zellweger, su novia hasta diciembre de 2004 y ahora casada con el músico country Kenny Chesney. Éste se casó en secreto con la modelo británica Karen Elson hace poco. De Meg, poco se sabe.
Los componentes de The White Stripes nunca han sido profetas en su tierra y el éxito (mundial) no les llegó hasta 2003, con la edición de Elephant, su cuarto disco. Un gran porcentaje de sus más de 3 millones de copias vendidas fueron de ese disco. De sus anteriores trabajos, White blood cells (2001), De stijl (2000) y The White Stripes (1999), vendieron poquitos en EE UU. Más en Reino Unido, Australia o Japón, donde han cimentado su fama. En Suramérica es grupo de culto.
Jack es una persona inquieta; aunque Meg también hace sus cosillas fuera de la banda. El primero, fuera del dúo, colabora en distintos proyectos musicales (Beck, Loretta Lynn y ha editado un disco junto a Brendon Benson). También ha actuado en varias películas: Cold mountain (además compuso varias canciones para la banda sonora), Coffee and cigarrettes (Meg también participó aquí) y Mutant swinger from Mars.
A Jack le gusta coleccionar huesos humanos y objetos de taxidermia. A Meg le encanta el pipermín (sabor de los caramelos que dan nombre e imagen al grupo) y las antigüedades, en especial los muebles de los años 50. Así ha decorado su casa. Ambos tienen especial predilección por el viejo continente, en especial por los países del este.