U2 mezcla su historia actual y pasada en el primer concierto de su gira
El San Diego Sports Arena albergó a 14.000 devotos que no perdieron detalle de las dos horas de concierto
Todo estaba preparado. En apenas unos meses se habían vendido más de dos millones de entradas recaudando cerca de 500 millones de euros. Pero los datos cedieron paso en la noche de ayer a un concierto espectacular. En un pequeño escenario circular con una ancha pasarela, similar al que fue empleado en la gira Elevation de 2001, y con la actuación previa de Kings of Leon.
Pese a un sonido algo deficiente, los incondicionales de Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mullen disfrutaron de un espectáculo visual compuesto por un fondo repleto de luces y tiras decorativas que caían desde el techo del escenario. Arrancaban dos horas de música con City of blinding lights, pasando por Sunday bloody Sunday, Pride (In the name of love), Bullet the blue sky y llegando al punto álgido con el tema Boy que les sirvió de debut allá por 1980.
14.000 espectadores reventaron el San Diego Sports Arena, algunos de los cuales hicieron cola a las puertas del estadio durante casi 24 horas para asegurarse el mejor puesto durante la actuación. Dos horas en vivo del mejor pop-rock del panorama actual y un repertorio de 21 canciones que pasan a la historia de la música.