Coque Malla da un toque roquero a la obra 'El otro lado de la cama'
Los nucleos musicales pasan ser el núcleo central en esta versión teatral
Los números musicales, que en la película fueron muy bien acogidos por público y crítica, pasan a ser el núcleo central en esta versión. Nada menos que Coque Malla es el encargado de imprimir a los siete números musicales un toque más "roquero".
Josep María Mestres señaló, en la presentación de la obra, que "la música sirve para potenciar la comedia, y la comedia a su vez da realce a la música". Los músicos, reclutados por el propio Coque Malla, tocan en directo en un stand situado encima del escenario, decorado de manera minimalista.
La trama de la versión se basa en las dos parejas protagonistas, enredadas en un enjambre de relaciones de amor, amistad y engaños. Para el director, de lo que se trata es de divertir al público de una manera inteligente, con una "reflexión" de fondo sobre la infidelidad en el amor y la amistad. En este sentido, afirmó que en la "levedad de la historia" está su secreto, sin "caer en la trascendencia fácil".
El elenco de los actores protagonistas lo forman cuatro jóvenes actores con más experiencia en televisión que en teatro: Lucía Jiménez, Raúl Peña, Diana Lázaro y Coté Soler. Raúl Peña, que ha aparecido en series como "Un paso adelante", indicó que lo más difícil para ellos fue la integración de los diversos lenguajes que manejan durante el transcurso de la obra: interpretación, danza y canto. "Lo más difícil ha sido cantar" sentencia Diana Lázaro, y es que los actores no eran especialistas en dicho arte. Los actores manifestaron que el trabajo de Marta Carrasco como coreógrafa había sido de gran ayuda para ellos.
La obra ha realizado un pequeño periplo por la geografía española antes de arribar a la capital. Diana Lázaro señaló que el público "se olvida a los cinco minutos de la película y se mete en un espectáculo nuevo", objetivo considerado fundamental para el director. La pretensión de no caer en el automatismo de pasar al teatro el guión cinematográfico, de David Serrano, ha sido una constante a la hora de perfilar la adaptación.