MTV recoge velas
Barcelona se erigió como la capital mundial de la música. Jamás tantos artistas de renombre habían estado juntos en la ciudad condal.
En el escenario P. Diddy, ex de la Jenny, la Lopez (la que se perdió la fiesta y agradeció el premio que le dieron por un vídeo) iba sacando trajes sin parar al escenario. Ahora de rapero, ahora de gangster con traje rayado, ahora con la camiseta homenaje al insigne productor Jam Master Jay asesinado recientemente en Queens.
Moby tendió su mano, públicamente y desde el atril de los ganadores, a Eminem y éste no se la devolvió. El rapero no está por la labor de hacer las paces con el de Nueva York. Saritísma Montiel, icono de la campaña de marketing de la MTV, retozó ?simbólicamente- con Dolce y Gabbana a la hora de entregar un premio. Estos no entendieron la broma y zanjaron la presentación dando paso al vídeo ??and the nominees are??. El futbolista del Barça Patrick Kluivert también presentó un premio (¡lo que cambian los jugadores de fútbol sin el chándal! Parecía Lenny Kravitz con el pelo corto). Y las Ketchup, las hijas del Tomate pusieron la nota de color. Su inglés imposible -tan imposible como el mini-vestido de la Aguilera, un traje que Cher hubiera rechazado por escandaloso- fue la imagen que los europeos se llevaron de nuestro país. Podía haber sido peor...
La ciudad de Barcelona comenzó anoche, de madrugada, a plegar las carpas de ese circo que se autoinvitó a nuestra ciudad y que nos regaló durante algo menos de una semana un puñado de buenos artistas y mil anécdotas para seguir contando durante mucho tiempo. La MTV seguirá su camino y nosotros el nuestro. Su circo no es el de Angel Cristo, es el circo de Siegfried & Roy ?los domadores de tigres blancos de Las Vegas-. La música por suerte se puede saborear de mil formas diferentes y por qué no, una vez al año, lo de los tigres blancos no está nada mal, a nadie le amarga un dulce.