Exclusiva: OBK volverá al estudio a finales de septiembre
Jordi y Miguel grabarán de nuevo bajo las órdenes Carlos Jean, quien ya produjo su anterio trabajo <i>Antropop</i> (2000)
En principio, todo indicaba que el nuevo y esperado disco de OBK, el octavo de su carrera, iba a estar listo para finales de 2002. Sin embargo, al final no será así. Jordi y Miguel llevan varios meses trabajando en las maquetas de los temas que formarán parte de él.
Está previsto que los catalanes entren en un estudio de Madrid la última semana de septiembre para grabar los 10 temas que atesorará Babylon, nombre que se baraja como posible. Según parece, hay cuatro sencillos muy claros entre los que está Lucifer, una composición que muy bien podría ser la continuación del éxito Tú sigue así.
En el tema de la producción, Carlos Jean, que ya llevó la batuta de Antropop (2000), volverá a coger las riendas del nuevo proyecto, al que imprimirá, como siempre, su personal impronta.
Aunque todavía es pronto para asegurar cuándo saldrá exactamente el álbum, todo parece indicar que la fecha estará dentro del primer trimestre de 2003.
Diez años de éxitos y fracasos
El pasado 2001 se cumplió el décimo aniversario de la publicación de la opera prima de OBK, Llámalo sueño (1991), con el que Jordi y Miguel se dieron a conocer, y del que se vendieron cerca de 500.000 ejemplares. Todo un hito para un grupo novel de música electrónica cuyas influencias recordaban -y lo siguen haciendo- mucho a la música de Depeche Mode -algo que ellos no han negado nunca, de hecho se sienten orgullosos de que se les compare con sus ídolos-.
OBK nunca pudo imaginar el tremendo éxito que tendrían con su primer disco, que grabaron con cuatro perras y que fue editado por una compañía indendiente de música de baile catalana a la que le vinieron muy bien las ventas millonarias de dicho álbum. Lo de vender tantos discos con un primer disco tiene sus ventajas y también sus inconvenientes, sobre todo estos últimos porque mantener el nivel -y las ventas- es muy complicado si no se hace con cuidado y esmero.
La carrera de Jordi y Miguel siguió en ascenso después de la publicación de Momentos de fe (1993). Tiempo después fueron fichados por una multinacional con la que editaron Trilogía (1995) y Donde el corazón nos lleve (1996), una época en la que la popularidad del dúo fue descendiendo paulatinamente.
De hecho en 1998 su actual compañía discográfica, Hispavox, les hizo sacar un álbum retrospectivo y les dio un ultimátum que pudo haber sido el final de OBK. Sin embargo, no fue así. Afortunadamente las ventas de dicho recopilatorio -que incluía un tema nuevo, Juicio interior, y una nueva remezcla de De qué me sirve llorar, su primer sencillo de éxito- fueron apabullantes. Jordi y Miguel se salvaron de la quema y volvieron a estatus de estrellas de la música pop de nuestro país, algo que habían perdido parcialmente en los años anteriores.
La vida de OBK cambió por completo y su música también. Para el que iba a ser su nuevo disco Antropop (2000) contaron con la producción del nuevo gurú de la música dance de nuestro país, el gallego Carlos Jean. Juntos imprimieron a la música del dúo catalán un toque mucho más bailable y comercial que hizo que de nuevo volvieran a colocarse en las primeras posiciones de las listas de éxitos.
En marzo de 2001, y como capricho, decidieron sacar Extrapop un CD que en su primera edición contenía un segundo disco con un DVD, y que además presentaba algunas remezclas, rarezas y temas inéditos del grupo.