Juanjo Bona, de ‘OT’ a ‘Recardelino’: “Quería hacer algo más comercial, pero me di cuenta de que no era mi camino”

Hace poco más de un año, Juanjo Bona salió de la final de Operación Triunfo en cuarto lugar. Durante los tres meses que duró el programa, se ganó este puesto gracias a su potente voz, su sensibilidad y el carácter que mostró. Además, en el programa, Juanjo llevó con orgullo la bandera aragonesa, hablando siempre con cariño de su pueblo, de la jota y de las tierras mañas. Al salir del programa, todos nos preguntábamos hacia dónde llevaría su música: si seguiría llevando por bandera la jota o se inclinaría por algo más pop. Ahora ya tenemos la respuesta.

Este viernes, Juanjo Bona lanza su primer disco, Recardelino. En este álbum, el cantante se abre completamente, recorriendo las distintas fases de su vida y abordando temas como la tradición, el amor y la familia. Con canciones como Moncayo, donde rinde homenaje a sus raíces, y La Virgen de Magallón, que celebra la tradición de su pueblo, el álbum es una declaración de amor por su tierra y por sí mismo. Desde LOS40, hemos querido conocer más sobre el proceso de creación del álbum, lo que ha llevado a Juanjo Bona a ser quien es, el camino que ha escogido en la música y cómo ha manejado su paso a la fama.

Vas a sacar tu primer disco, ¿Qué significa para ti Recardelino?

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Pues para mí significa todo, porque es el primer disco de mi vida. Es un álbum que habla de mi vida, que contiene la Jota, que para mí es mi vida también y súper importante. Y no sé, es como algo bastante especial y el primer proyecto que siempre soñé. Para mí está siendo todo.

¿Estás nervioso?

Muchísimo, estoy muy nervioso por la salida del disco, porque ya queda nada. Y aparte porque también está muy cerca del comienzo de la gira, entonces estoy como ensayando a la vez que preparando el disco.

El sonido de tu disco bebe de diferentes influencias del folclore, del pop y sonidos tradicionales. ¿Qué te ha hecho elegir este camino y no algo más comercial?

Fue un trabajo difícil el darse cuenta de que lo que yo tenía que hacer era esto. Al principio yo sí que era más partidario de hacer algo más comercial o más genérico, algo que pudiera entender más gente. O ya pensaba que ya me guardaría el folclore para más adelante, pero es verdad que cuando me puse a componer y hacer canciones, me di cuenta de que no era mi camino. Estoy feliz con este proyecto y creo que ha sido un acierto total poder hacer algo así, que este es mi elemento diferenciador, que esto es lo que yo soy de verdad.

Estuviste con Rodrigo Cuevas, un cantautor asturiano muy ligado a sus raíces, que lo llegan a definir como “la voz queer de Asturias rural” ¿Te gustaría hacer algo similar con la música de Aragón?

Nos conocimos este verano en Asturias. No he podido trabajar con él, pero estuvimos hablando en su casa. Para mí fue un sueño conocerle, porque es una inspiración absoluta. Ha roto con los estereotipos del folclore y de todo en general. Su folclore no es el común de Andalucía, sino que se basa en su tierra asturiana. Me encanta, y es una referencia absoluta. En sus últimos proyectos, mira el folclore desde otro lado, más trasgresor o más divertido. Creo que este proyecto mío es un poco más naive. Ojalá algún día poder llegar a abrirme y a romperme como lo hace él.

¿Y qué tiene tu tierra para que le escribas casi un disco entero a esas raíces?

Pues tiene todo, porque es donde yo he aprendido a cantar y a ser quien soy a día de hoy. Es lo que me hace ser diferente. Al final yo estaba buscando qué era lo que me hacía distinto o qué era lo que yo podía ofrecer al público. Y estaba mirando afuera y realmente es que lo tenía dentro: mi pasado y mi pueblo y mi gente. Y eso era lo que yo podía contar al mundo porque es que otra cosa no tengo. El pueblo es una inspiración. Y yo considero el pueblo tanto el lugar físico como la gente que lo rodea: el costumbrismo, la jota y la raíz que tenemos la gente de ahí.

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No hay colaboraciones en el disco, ¿por qué?

Creo que todo el disco ha sido un poco el fruto del destino. Estoy feliz con el resultado final. Hubo momentos en que iba a tener una colaboración, dos, incluso más, pero por A o por B luego se cayeron. Al final este álbum ha tenido que ser mío solo porque es mi primer disco, mi carta de presentación. Las colaboraciones las podemos dejar para a partir de ahora.

¿Y colaboración que te habría gustado tener?

Amaia es mi ídolo absoluta. Muchos artistas que fusionan el folk, como María Arnal, también me inspiran.

Cambiando de tema… Tienes una base de fans muy fiel, que te apoya mucho pero que también está muy atenta a los números de streaming. ¿Tú también sigues esas cifras de cerca?

La verdad es que no, cada vez menos. Al principio tengo que decirte que sí, que estaba bastante más pendiente tanto de eso, de las cifras numéricas como de todo lo que se opinaba y parecía que eso era la verdad absoluta.

Al principio estaba más pendiente de los números de streaming y de lo que se opinaba de mí.

Hace tiempo me di cuenta de que, obviamente, mis fans lo son todo para mí. Son quienes, junto a mi trabajo, hacen que esto siga adelante. Pero a veces, creerme tanto lo bueno como lo malo me influye en mi forma de ser y de pensar, hasta el punto de sentir que todo está pasando al cien por cien y que todo el mundo es consciente de ello. Luego, la realidad es otra: son mareas de redes, y por eso prefiero mantenerme al margen, hacer mi trabajo, compartirlo con ellas y dejar que lo reciban como quieran. Aun así, sí que estoy bastante al día de todo.

¿Tienes alguna expectativa sobre cómo funcionará el disco?

La verdad es que no, o sea, yo creo que va a gustar muchísimo porque lo he hecho desde el corazón absoluto y a la gente que se lo he enseñado le ha llegado al alma. Tenía bastantes miedos de que igual no se entendiera mucho porque hay varios conceptos del disco, varias capas igual complejas de explicar. Al final la jota es muy desconocida o lo que yo hablo y cuento de mi pueblo pues es bastante ajeno a mucha gente. Pero es verdad que todo el mundo que lo ha escuchado, conocedor de la jota o no, ha entendido todo.

Además de las redes sociales, tu conexión con los fans ha ido un paso más allá. Para presentar el álbum, organizaste un sorteo en el que los ganadores pudieron hacer un tour hecho por ti de tu pueblo. ¿Cómo surgió la idea y cómo fue la experiencia?

La idea surgió porque, cuando me enteré de que al sacar un disco habría una fiesta de lanzamiento, pensé: "Por Dios, esto tenemos que hacerlo en mi pueblo, no hay otra opción". Pero llevar a todos los medios y a todo el mundo allí era complicado. Entonces, desde Universal me propusieron, en lugar de hacer eso, organizar una listening party en un estudio, como se suele hacer. A mí esa idea no me convencía demasiado, así que optamos por algo más especial: un viaje allí, más natural y cultural.

Así que nos fuimos a Magallón. Me vino de maravilla porque hacía muchísimo tiempo que no pisaba el pueblo. Me encontré con gente increíble: súper inteligente, artística, y fue una experiencia alucinante. De hecho, me hice incluso amigo de algunas personas.

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Después de haber vivido el fenómeno de Operación Triunfo y ahora en breves el lanzamiento de tu primer disco, ¿qué ha sido lo más bonito y lo más difícil de este año?

Lo más bonito, sin duda, es despertarme cada día sabiendo que me dedico a la música, que tengo entrevistas y que ya no estoy haciendo cosas que no me gustan, sino exactamente lo que siempre soñé. Eso es precioso. También me emociona ver cómo, sin pretenderlo, he podido ayudar a gente que está pasando por momentos difíciles, ya sea por problemas personales o de salud. Que alguien me diga que una canción, un saludo o una felicitación mía le ha alegrado el día es, para mí, el mayor regalo.

En cuanto a lo más duro, la verdad es que hay muchas más cosas buenas que malas. Al final, lo difícil se acaba yendo, pero sí hay algo que pesa es la falta de intimidad. Sobre todo cuando tengo un mal día. Cuando estoy bien, me encanta la gente y disfruto de su compañía, pero en momentos bajos se hace complicado. Hay quienes se acercan con cariño, pero también quienes te graban sin permiso y ni siquiera escuchan tu música. Simplemente te reconocen de pasada porque has salido en televisión, y a esa gente realmente no le importas. Eso sí me molesta. Creo que lo más duro es la sobreexposición y que, a veces, se hable tanto.

Te has convertido en una figura pública y, en ocasiones, has estado en el foco mediático. ¿Cómo gestionas tu privacidad?

La verdad es que cada vez lo llevo mejor. Al principio tenía más esa sensación de tener que tener que continuar con la esencia del 24 horas de 'OT', como una especie de deuda con los fans. Pero con el tiempo me he dado cuenta de que, aunque me encantan las redes sociales y sigo muy activo porque lo disfruto, también es importante encontrar un equilibrio. Poco a poco, intento tomar las riendas de mi privacidad, darle más espacio a los momentos íntimos y valorar esos instantes de soledad, en los que no hay foco, simplemente estar y disfrutar.

Tu gira empieza en nada, ¿Qué nos puedes adelantar?

La gira comienza la semana que viene y está completamente ligada a este primer disco. Se titula Tan Mayor y tan Niño, en referencia a Mis tías, y la verdad es que estoy muy contento. Primero voy a actuar en teatros, que para mí son el mejor escenario. Está casi todo vendido, aunque aún quedan entradas, y eso ya es un sueño cumplido. Además, habrá muchas sorpresas.

También habrá mucho folclore y, al final, lo que más ilusión me hace es cantar. He subido al escenario muchísimas veces, tanto con la orquesta como en mis conciertos, pero nunca lo he hecho interpretando mis propias canciones. Creo que va a ser algo súper especial y voy a darlo todo.

¿Habrá acompañamiento instrumental?

En el escenario habrá acompañamiento instrumental, por supuesto. Los productores del disco, Marcel Valles y David Soler, que también son los directores musicales, estarán presentes. Vienen conmigo, junto a un percusionista, así que estaremos bien arropados.

Si pudieras decirle algo al Juanjo que entró en OT, ¿Qué consejo le darías?

Le daría el consejo que siempre repito, aunque parezca un cliché, porque a mí me ha cambiado la vida literalmente. Creo que cada persona tiene su propio momento para darse cuenta de que lo más importante es ser uno mismo y, sobre todo, confiar en sí mismo. En mi caso, yo no confiaba nada, y aunque todavía me cuesta, cada vez lo hago un poco más. De hecho, por esa falta de confianza, al principio decidí no seguir mi camino folclórico o vital. Pero al final, cada uno tiene su propio proceso de descubrimiento. Así que ese sería mi consejo: que haga lo que realmente lleva dentro.

Para terminar, ¿Qué te gustaría que la gente sintiera al escuchar Recardelino?

A mí me gustaría que sintiesen cercanía, paz, tranquilidad, que conecten con su yo y con su raíz y con la raíz de su familia y de sus amigos. Que conecten de donde vienen, recordando su pasado pero también haciendo balance de lo que son a día de hoy, que es un poco el concepto del álbum. Sí, que se emocionen y pensarán en su pasado un poco, hacer un poco de honor a de donde venimos.