Cada vez hay menos cazadores… pero el 85% de España es un coto de caza
La edad de los cazadores cada vez es mayor y la incorporación de jóvenes a la actividad se ha desplomado.

La caza está de capa caída. / Yves Adams
La caza no tiene relevo generacional. Es la principal consecuencia que se extrae de una investigación del Instituto Pirenaico de Ecología-CSIC, que analiza la estructura demográfica actual de los cazadores de gran parte de la Península Ibérica.
En los últimos 50 años, el número de personas que se dedican a la llamada actividad cinegética ha disminuido un 45%, en un proceso que se ha ido acelerando progresivamente: solo en los últimos 15, ese descenso ha sido de un 26%. En el citado medio siglo, la incorporación de jóvenes se ha reducido un 89%. Hoy por hoy, el grupo de edad más abundante está entre los 61 y los 70 años.
Para 2050 la actividad cinegética habrá disminuido un 70%
El informe ha tenido en cuenta los datos de 600.000 cazadores pertenecientes a seis comunidades autónomas españolas (Andalucía, Murcia, Castilla-La Mancha, Madrid, Aragón y Navarra) y a Portugal. En conjunto, estos territorios representan casi el 60% de la población de la Península y de su superficie. De seguir el ritmo que apunta el estudio, para el año 2050 la actividad cinegética habrá disminuido un 70% y la proporción de cazadores mayores de 60 años pasará del 40% al 61%.
Las mayores reducciones en la incorporación de jóvenes se producen en aquellas áreas con mayor número de cazadores como Portugal y Castilla-La Mancha, que acumulan disminuciones de más del 90%. Eso sí: donde se mantiene la transmisión de la caza es en los pueblos más pequeños, donde la incorporación de cazadores jóvenes es 20 veces mayor que en las grandes ciudades.
Un suculento negocio
Se da la circunstancia de que, pese a que los cazadores sólo representan un pequeño porcentaje de la sociedad, el territorio del que disponen para ello es inmenso. De hecho, España es un gigantesco coto de caza: el 85,7% del país está parcelado en 31.786 terrenos cinegéticos de distinta consideración (privado, público o social), según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).

La caza, en el punto de mira. / Yves Adams

La caza, en el punto de mira. / Yves Adams
Además, un puñado de familias controlan un suculento negocio que mueve mucho dinero, en torno a 6.000 millones de euros al año. Buena parte de ello está en manos de unas pocas personas: apenas 500 familias controlan una porción del territorio equivalente a Navarra, País Vasco y La Rioja juntas, en un total de 1.669 grandes cotos de caza.
Más allá del daño al medio ambiente que denuncian los ecologistas, que recuerdan el daño que hace el plomo en muchas especies, y de la oposición de los animalistas, que ponen en valor la vida de los 30 millones de animales que mueren cada año a causa de los disparos, cada vez son más los ciudadanos que se muestran en contra de una actividad que también se cobra vidas humanas. Tal y como te contamos recientemente en El Eco de LOS40, la caza ha dejado 10 muertos y 20 heridos en apenas cuatro meses.