Muere Merche Mar, la última reina de El Molino
La ‘última gran vedete’ del Paralelo barcelonés ha fallecido este martes
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Merche Mar posando en la premiere de 'The Hole' en Barcelona. / Robert Marquardt
Este martes, el mundo del espectáculo se ha quedado en shock al conocerse la triste noticia del fallecimiento de Merche Mar, la última gran vedette del Paralelo de Barcelona, según ha informado la agencia EFE. La artista, que sufrió un ictus hace unos días, no ha podido superar las secuelas y ha fallecido rodeada de sus seres queridos.
Merche Mar, cuyo verdadero nombre siempre mantuvo en secreto, comenzó su carrera en la sala El Molino de Barcelona en 1965, cuando apenas era una adolescente. Sin antecedentes teatrales en su familia, logró destacar en un momento en el que despuntaban artistas como Johnson y Escamillo. Su talento y carisma la convirtieron rápidamente en una figura emblemática del cabaret barcelonés.
A lo largo de su extensa carrera, Merche Mar participó en numerosos espectáculos, entre los que destacan Rubias y morenas, La flauta del faraón, Las pícaras molineras, Béseme donde quiera, Taxi al Molino y Pluma y peineta. Este último montaje se realizó antes del cierre de la sala en 1997. Sin embargo, en 2010, Merche Mar volvió a "su" Molino para actuar como anfitriona en la reapertura del local con el espectáculo Made in Parallel.
Su trayectoria más allá de El Molino
Además de su trabajo en El Molino, Merche Mar también actuó en salas de toda España, en televisión y en cine, destacando su participación en la película Soldados de Salamina. En 2005, publicó su libro de memorias titulado El Molino. Historias de una vedette, en el que relataba sus experiencias y anécdotas a lo largo de su carrera.
El agitador cultural Joan Estrada, en declaraciones a EFE, ha lamentado profundamente la pérdida de la artista, a quien ha descrito como un "auténtico símbolo de Barcelona". Asimismo, ha destacado su simpatía y cercanía, así como su habilidad para ganarse al público, especialmente a las mujeres, convirtiéndolas en sus cómplices durante las actuaciones.
Todos aquellos que pudieron disfrutar de su talento la recordarán por ello y por su profesionalismo, así como por su solidaridad y compañerismo. Sus colegas, como Lita Claver "La Maña", Amparo Moreno y Susana Egea, la describen como una persona generosa y humilde, que nunca se comportó como una estrella a pesar de su éxito.