Andrea y Joel se reencuentran en la hoguera de confrontación en ‘La isla de las tentaciones’ y toman la decisión esperada
Ven imágenes juntos de ambas infidelidades con Nataly y Borja
Joel y Andrea viven su hoguera de confrontación en 'La isla de las tetanciones'. / Mediaset
El pasado lunes acabó el programa de La isla de las tentaciones con un nerviosísimo Joel esperando para comprobar si Andrea había aceptado la hoguera de confrontación que había pedido para reencontrarse y pedirle disculpas por el fallo que había cometido al besar a Nataly. En la última hoguera se negó a ver imágenes de su chica y todavía no sabía que se había besado con Borja.
Este miércoles hemos podido comprobar que Andrea decidió acudir a la hoguera y hemos vivido unos momentos de mucha intensidad con la pareja más comprometida de la edición.
Andrea llegó a la hoguera flipando y muy enfadada sin querer dar un abrazo a su pareja y reprochándole que pidiera él la hoguera de confrontación habiendo sido él el que la había puesto los cuernos.
Joel aseguraba que el que había estado en la villa no era él y, aunque quería agarrar todo el rato la mano de su chica, ella no estaba por la labor. Explicó que la había visto mal en la villa y que su intención no era hacerla daño.
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Viendo imágenes juntos
Joel solo quería que su chica lograra entender lo que le había sucedido para actuar como lo ha hecho. Las primeras imágenes fueron las del beso de Joel a Nataly, que él se negaba a ver mientras ella lo hacía por primera vez porque en su anterior hoguera no fue capaz de hacerlo. Pidió disculpas y le confesó que se arrepintió al segundo.
Luego llegaron las imágenes del beso de Andrea y Borja y ella no le permitió echarle nada en cara después de lo que él había hecho primero. “Me duele ver esto, no me lo esperaba”, reaccionaba un alicaído Joel mientras ella le aseguraba que no iba a estar llorando mientras él le ponía los cuernos en la otra villa.
La sangre le corrió por las venas cuando vio que no solo había sido un beso y que incluso, habían dormido juntos. No entendía, después de descubrir la relación de Andrea con Borja que se mantuviera tan entera y no hubiera aparecido pidiendo disculpas. Ella insistía en que no estaba arrepentida porque lo había hecho después de su infidelidad y se había dejado llevar y había hecho lo que le apetecía.
Cuando veían las imágenes de Andrea destrozada al ver el beso de Joel en la hoguera, él se venía abajo y se quedaba hecho polvo. Reconocía que se había equivocado al encontrarse una chica que le atraía físicamente.
La decisión final
Sandra les pedía que dejaran de lado rencores, reproches y enfados para pensar el uno en el otro y sus tres años de relación. Era el momento de hablar con el corazón.
“Te lo juro que yo me he abierto aquí lo más grande, lo que no me pensaba nunca, ni me he reconocido aquí porque me he dado cuenta de que, de verdad, estaba enamorada de ti, de que te quiero un montón”, decía Andrea rompiéndose del todo.
“No me podía creer lo que estaba viendo, te lo juro. Veníamos aquí a que tú confiaras en mí y vas tú y me fallas”, decía llena de lágrimas mientras su chico la abrazaba y la aseguraba que la quería y que no deseaba perderla por nada del mundo.
Andrea reconocía que con esta experiencia había aprendido un montón: “Tengo que quitarme esta coraza que tengo, ese orgullo, intentar expresarme mejor, saber que no tengo que ser tan fría, que tengo decirte más ‘te quiero’, tengo que estar más contigo, ser más cariñosa contigo, tener más detalles contigo porque sé que no los he tenido mucho en la relación y aquí me he dado cuenta de eso también”.
“Esto es lo que quería escuchar desde hace mucho tiempo, solo te he pedido eso siempre. Si tú tuvieses esas cosas, yo me caso contigo mañana y lo sabes. Solo te pedía comunicación y cariño muchas veces, lo demás, para mí eres perfecta en todo”, le decía Joel.
Le tocaba abrirse a él: “Creo que ya lo sabes, pero te lo voy a decir las veces que haga falta. Por mucho que hayas visto lo que hayas visto y el error que he cometido, sigues siendo mi niña y eres la mujer que quiero tener a mi lado. Estos tres años he aprendido contigo lo que es querer, yo nunca había querido a nadie como te quiero a ti. Me has hecho vivir muchas cosas, sabes lo que tenemos fuera, todo lo que tenemos planeado, el futuro que tenemos los dos. Hemos podido con muchas cosas y me he dado cuenta de que eres diferente al resto. Te amo”.
La respuesta a la pregunta final, cómo quieren abandonar la isla, parecía clara y no defraudaron. Se eligieron y el amor pudo con la tentación.
Reacción de la audiencia
La audiencia se ha quedado encantada con esta pareja, con su crecimiento en el programa y, por supuesto, con su decisión final. Eso sí, como siempre ocurre, se han creado bandos, unos apoyan a Joel, otros entienden a Andrea -menos- y los hay, incluso, que son capaces de empatizar con ambos.
El amor, a veces, sí puede con todo.
