Benita (Maestro Joao) nos cuenta cómo está viviendo su nueva identidad: "Estoy haciendo una transición en la que no tengo referentes. Mi referente estoy siendo yo"

Puede haber sido lo más comentado en España en las últimas diez horas, y aun así Benita llega a Gran Vía 32 dispuesta a bordar su sección en Anda Ya como un martes cualquiera. Resulta casi irónico que se centre en explicar cómo hacer un ritual contra las malas energías, pues últimamente solo recibe cariño y apoyo de la gente.

"Ha sido un bombazo. Me sorprendió mucho que 'Benita' fuese tendencia en Twitter", nos empieza diciendo. Como cualquier telespectador sabrá, su segundo programa como concursante de Bake Off: Famosos al Horno no solo estuvo marcado por hacerse con el delantal azul —el trofeo que la distingue como ganadora del episodio—, sino por una petición que emocionó a la audiencia.

"En esta casa, en TVE, di el paso de anunciar mi transición. Estoy en ella, llevo unos meses siendo quien soy [...] y me gustaría que también en esta casa, a partir de ahora, ser ya Benita. Me encantaría", le decía a Paula Vázquez y a todas sus compañeras. El aplauso fue generalizado no solo delante y detrás de las cámaras, sino también ante las pantallas de las televisiones de España.

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El pasado mes de mayo, la también presentadora de El Elegido sorprendía en la recta final de Baila como puedas contando que empezaría una transición para empezar a ser "quien verdaderamente era". Ahora, en el que es su primer proyecto televisivo como mujer, ya ha pedido que se le trate como tal con una increíble respuesta por parte de todo el mundo.

"Que los compañeros, la presentadora, los jueces, el equipo técnico... llorasen, se alegrasen, aplaudiesen... en definitiva la algarabía, el abrazo y la emoción fue más largo de lo que salió en emisión", comenta. Otro de los momentazos de la noche fue, de hecho, cuando Paco Roncero, cocinero y miembro del jurado del talent culinario, interrumpía la escaleta del programa para entregarle un nuevo delantal en el que se podía leer 'Benita'.

En el equipo de 'Bake Off' han sido absolutamente maravillosos. Han tenido un tacto, una delicadeza... brutal. Les estaré eternamente agradecida.

—  Benita

"No me lo esperaba para nada. Creo que además las cámaras recogieron la imagen de que yo me quedé absolutamente sorprendida. En el equipo de Bake Off han sido absolutamente maravillosos. Han tenido un tacto, una delicadeza... brutal. Les estaré eternamente agradecida", dice sobre la especial atención que ha tenido el programa en no caer en faltas de respeto involuntarias, aunque también ha tenido apoyos con sus compañeras de edición.

"Me ha apoyado mucho Nagore Robles, Lidia Torrent, Carmen Morales y Pol Espargaró. Me han apoyado muchísimo y yo me he apoyado en ellas, aunque he de decir que con el resto de gente también me he llevado súper bien. Me suelo llevar bien con la gente, pero tenía más chispa con ellas", cuenta, algo que ya se puede ver tanto en los primeros episodios como en sus respectivas redes sociales. "Formamos el grupo de 'Jóvenes y brujas', creamos un chat y todo. Y cotilleamos", dice entre risas.

Una transición sola, pero muy bien acompañada

Puede que la transición de Benita haya sido pública, pero el proceso lleva mucho tiempo siendo algo muy suyo. "Siempre lo sopesaba, pero cuando llegas a una edad sopesarlo se va convirtiendo en una voz muy pequeña. Porque tienes una edad, porque corres unos riesgos, porque es algo que no está tan experimentado como en la gente joven. Lo sopesaba lejano, pero soy muy valiente y un día dije, "para adelante", y lo verbalicé en el programa", relata, refiriéndose a Baila como puedas.

Después de 'Baila como puedas' pasaron seis meses en los que estuve informándome de médicos, clínicas, procesos, todo. Ahí me di cuenta que estaba sola. No encontraba un referente.

—  Benita

Pero evidentemente no se quedó en el calor de los focos. "Después de eso pasaron seis meses en los que estuve informándome de médicos, clínicas, procesos, todo. Ahí me di cuenta que estaba sola. No encontraba un referente. Preguntaba a gente y me respondían, sí, pero me decían: "Yo hice esto, pero tenía dieciocho años, a mí esto no me pasó" o "yo esto no lo tenía". Ahí me di cuenta que me estaba metiendo en una habitación oscura en la que tenía que encontrar la salida, como en un escape room de esos, en el cual puedes o ir dándote golpes o no salir nunca", reflexiona.

"A los seis meses lo tenía controlado, y llevo ya otros seis meses haciéndome el tratamiento", una realidad que no solo se puede ver en sus perfiles en redes sociales, donde habla sin tapujos del proceso; sino también en la mencionada decisión de presentar su nueva identidad en Bake Off. Le nació, según comenta, gracias a aceptarse a sí misma: "Soy una mujer de impulsos. Estaba haciendo ya mi tratamiento, mi interior ya era el de una mujer. Me parecía que no era yo, que estaba engañando a la gente, yo era Benita ya. Creía que debía ser honesta y exponerlo, exponer quién era y cómo quiero mostrarme, cómo quiero que me sientan. Carmen es Carmen, Nagore es Nagore, Lidia es Lidia... yo soy Benita. Y quiero ser Benita, porque adoro ser Benita. Porque me siento Benita y porque soy Benita".

Después de mentarse tantas veces, recuerda a su madre, ahora tocaya: "El cambio de nombre lo descubrí afortunadamente antes de que muriese mi madre. Supo que me iba a llamar como ella y se puso súper ancha y súper feliz. Ella siempre decía que yo era su favorito, aunque quería a todos por igual. Estábamos muy unidos".

En este proceso ha estado acompañada de su novio, Santi, al que apoda "el rubio" y con el que lleva ya cuatro años y medio de relación: "Él siempre había sabido que me sentía como mujer. De hecho, él no ha tenido ninguna otra relación con ningún chico y él siente que su relación conmigo es con una mujer. Me dijo que hiciese lo que yo quisiese y como yo me sintiese mejor. Que él lo apoyaba y me respetaba. Me pareció fundamental".

No se olvida de su otro pilar, Tony Rodríguez, su mánager de eventos y booking: "Es una persona elemental en mi vida, podría llegar a decir la más importante. Desde el principio es quien más me ha ayudado. Cambió el trato en femenino desde literalmente el primer minuto en el que le comenté sobre mi transición, que es muy difícil cuando llevas años hablando a esa persona en masculino. Y sé que a su entorno le ha indicado esto así y a cualquier persona que conoce. Me proyecta mucha seguridad y es muy importante, porque en un tratamiento así donde la inseguridad es así de grande, donde no sabes hasta dónde llegar o cómo porque no hay tanto de dónde fijarse... es importante tener a alguien al lado. Lo adoro".

Benita, la reina de la colmena

De nuevo, que Benita se haya presentado públicamente bajo un share amplio y unas interacciones en redes altas, no ha traído más que un refuerzo de la legión de seguidores que ya arrastraba desde que leía el tarot en televisión y que afianzó con su llegada por todo lo alto a la isla de Supervivientes en 2018. Una audiencia que ahora vuelve a abrazarle en esta nueva etapa.

"Me sorprendió la cantidad, y cantidad, y cantidad de mensajes de cariño y dando las gracias por mi propio mensaje, valga la redundancia. La gente me hablaba de lo necesario que es", comenta, agradeciendo también a su vez "a TVE, porque esto es educar a la sociedad".

Ha echado de menos, eso sí, el apoyo de las asociaciones ya no en estos momentos, sino en toda su transición: "Me habló la gente de a pie, ninguna asociación LGTBi. Que siguen sin decir nada y yo no los necesito ya para nada. Quiero ser muy clara en esto".

Sin embargo, no recrimina la falta de apoyo por haber pasado por el proceso sola, sino porque siente que hubiera sido beneficioso para el propio colectivo: "Yo tengo una edad, y estoy haciendo una transición en la que no tengo referentes. Mi referente estoy siendo yo. Me hubiera venido bien que, por un lado, me hubieran apoyado a mí, y por otro, que ese apoyo se hubiera materializado de cara a ayudar a más personas que pasen por el mismo proceso".

Pero esas personas (el colectivo trans) que sepan que me tienen a mí. Se habla de los adolescentes, de la gente joven, de lo nuevo. ¿Pero y nosotras? Bueno, pues ya estoy yo.

—  Benita

"Pero esas personas que sepan que me tienen a mí. Se habla de los adolescentes, de la gente joven, de lo nuevo. ¿Pero y nosotras? Bueno, pues ya estoy yo", proclama, tendiendo la mano a quien la necesite. "Me siento Cleopatra, con todas mis tropas imperiales que son mis abejitas, que así llamo a mis seguidores y seguidoras, que yo les adoro", concluye, con una sonrisa certera en la cara. Desde LOS40, donde siempre tendrá su casa, solo podemos decirle una cosa: bienvenida, con 'B' de Benita.

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