Kiko Jiménez desvela en ‘Supervivientes’ el momento tan surrealista que comparte desnudo con su suegra, Maite Galdeano
Y Rubén Torres asegura que él también se apunta
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Kiko Jiménez, en 'Supervivientes'. / Mediaset
Kiko Jiménez no puede olvidarse de su chica, Sofía Suescun, con la que se reencontró hace unos días en Supervivientes. Aunque casi, habla más de su suegra, Maite Galdeano, que de ella. Y es que se trae un jueguecito con Rubén Torres sobre la buena pareja que harían.
Estos días, durante una de esas charlas en grupo en sus tiempos muertos en la playa, hablaban de ella. Kiko le contaba a Miri que “la Maite tiene tu cuerpo, además fibrado”. Y les explicaba a sus compañeros que nada más levantarse se lanzaba al suelo para hacer abdominales, “todos los días de su vida”.
Después del ejercicio, su costumbre es abrir la venta y gritar esa frase que tanto le gusta a Jorge Javier Vázquez: “Un día más en la vida, un día menos para morir”.
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“Después de la cena me iré a dormir a mi casa porque yo me levanto y soy de los de hacer el vago en la cama”, intervenía Torres sobre esa supuesta cita que van a tener.
Kiko insistía en el buen cuerpo que tiene su suegra, “luego se pone la ropa de la Sofía y te quedas muerto porque dices, es la Sofía cuando crezca”.
Una casa nudista
“Va en topless en casa y a mí no me importa, no pasa nada, es la vida, a mí no me asustan dos tetas, y todo igual. Por eso digo que eso digo, es que son iguales, todo en su sitio, todo perfecto”, seguía explicando sobre su chica y su madre. “Pues cuidado no te confundas”, bromeaba Arkano.
“No, pero hay muy buen rollo. Nosotros hemos hecho paellas desnudos”, confesaba Kiko para asombro de sus compañeros que se imaginaban esa escena tan surrealista. “Yo me apunto a una paella de esas, me gusta”, aseguraba Torres.
Seguro que más de uno querría que hubiese cámaras en ese momento. Las habrá cuando Maite Galdeano se convierta en la próxima visita en Honduras que volará allí no para reencontrarse con su yerno sino con Torres para comprobar si surgen chispas. Una decisión que no le gusta a todo el mundo.
Veremos qué pasa y hasta dónde está dispuesta a llevar el espectáculo.