Es posible convertir canciones en anclajes para nuestras emociones: “Es entrenar a tu cerebro”

No hay que estudiar mucho para saber que todos tenemos una banda sonora de nuestra propia vida. La música está presente en muchos momentos y recuerdos que van describiendo nuestra historia y generando multitud de sensaciones recurrentes. Pero, esa banda sonora, ¿la elegimos o nos viene dada?

“Hay una mezcla importante entre lo que hemos estado escuchando de fondo en nuestras casas y el desarrollo de nuestra propia personalidad, de nuestra identidad, que va por un camino u otro, explica Enrique Jurado, coach y experto en inteligencia emocional y programación neurolingüística.

Jurado es el impulsor de Coaching Pro Live 24, un evento de coaching y desarrollo personal que va a entrar en el Libro Guinness de los Records por ser el acto con mayor número de horas seguidas de emisión en directo por streaming en el mundo, que se celebrará del 3 al 9 de junio.

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Como experto en la materia, sabe de sobra que la música es un proceso de sinestesia que consigue que “el ser humano sea capaz de estar continuamente uniendo sonidos e imágenes junto con sensaciones. Todo lo que vivo y las sensaciones que me produce están dentro de un contexto auditivo, visual y kinestésico”.

¿Qué efectos produce la música en el cerebro?

Palabras quizás un poco técnicas que lo que vienen a decir es que “las canciones nos despiertan emociones porque nos hacen recordar, nos generan un montón de conexiones neuronales que nos permiten vivir la vida con recuerdos y con distintas sensaciones que nos elevan, nos amplifican o nos disminuyen cada una de las distintas experiencias”.

Seguro que en más de una ocasión has escuchado una canción que te ha puesto feliz porque te ha recordado a tu adolescencia. O, por el contrario, has escuchado otra que te recuerda a un ex y te ha puesto triste o de mal humor. Jurado asegura que podemos tener control sobre esas sensaciones porque, aunque muchas de esas asociaciones nos vienen dadas de manera inconsciente, “luego nosotros podemos intensificar o disminuir la intensidad de las sensaciones que vivimos”.

¿Qué son los anclajes?

Jurado habla de anclajes, que para el que no esté muy familiarizado, explica que se trata de “una asociación realizada de forma inconsciente entre imágenes, sonidos y sensaciones. Esa asociación es inconsciente pero luego las podemos hacer conscientes y utilizarlas para nuestro beneficio”.

Explica que la música y las canciones nos pueden cambiar rápidamente nuestro estado emocional por los recuerdos a los que nos remiten y asegura que podemos utilizarlos para nuestro beneficio personal creando nosotros mismos esos anclajes.

“Un ejemplo: en una situación en la que uno se encuentra seguro de sí mismo, con confianza y motivación, si pones una canción de fondo mientras experimentas esta sensación de fuerza y seguridad ya estás creando un anclaje y cuando necesites sentirte de nuevo así solo con escuchar esa canción estarás a tope de energía. Es entrenar a tu cerebro para asociar una determinada sensación a una canción, una palabra o una frase, por ejemplo”, explica.

Y que conste que la edad no es una excusa porque no influye, “mientras nuestro cerebro siga haciendo asociaciones, que es desde que nacemos hasta que morimos, podemos seguir creando esos anclajes”.

¿Hay géneros más propicios para los anclajes?

Muchos se estarán preguntando si hay canciones que son más propicias para generar esos anclajes y el experto en inteligencia emocional asegura que “hay canciones románticas que te van a llevar por un tema cultural a sensaciones más de amor; otros que te llevan a la energía (por ejemplo, la canción de Rocky). En función de las sensaciones que quieras experimentar, hay géneros más propicios que otrosque te llevarán a vivir aquello que deseas en cada momento”.

Una gran responsabilidad para los artistas que son los que posibilitan esos anclajes. “Pueden y deben utilizar ese altavoz que tienen para llevar a las personas a tener anclajes muy positivos, de ilusión, de ganas, de fortaleza, de crecimiento. Son grandes altavoces y pueden servir para bien o para mal, depende de cómo lo hagan y el camino que elijan”, asegura Jurado que deja claro que es decisión personal de cada artista.

La nuestra es elegir aquellas canciones que nos pueden llevar a crear buenas sensaciones en nuestra vida. ¿Decidido a comenzar tu entrenamiento?