¿Cuánto contamina tu casa? Todos los edificios tendrán que ser cero emisiones desde 2030
El Parlamento Europeo aprueba una ley que cambiará radicalmente la manera de construir.
Cuando pensamos en emisiones de CO2, nos vienen a la cabeza sectores como el transporte o la ganadería. Pero no son los únicos. En realidad, una gran parte de las actividades que llevamos a cabo en nuestro día a día tienen una huella medioambiental. Incluso nuestro propio hogar. Según datos del consejo mundial de energía (World Energy Council), las emisiones totales anuales de una vivienda son 1,3 tCO2, resultando en unas emisiones de 14 kgCO2/m2 para una superficie media de 93 m2.
Con esa realidad en mente, el Parlamento Europeo acaba de aprobar la normativa que exigirá que todos los nuevos edificios que se construyan en la Unión Europea a partir de 2030 sean de cero emisiones. Es más: esa obligación se adelanta a 2028 en el caso de los inmuebles públicos. La medida ha sido aprobada por una amplia mayoría: 370 votos a favor, 199 en contra y 46 abstenciones.
El plan es ambicioso, por lo que tendrá un coste elevado. La Comisión Europea estima harán falta 275.000 millones de euros al año de aquí al citado 2030 para renovar el parque de edificios. Eso sí: el organismo reconoce que la situación de cada país es diferente, por lo que los costes pueden variar de manera muy significativa entre uno y otro. En cuanto al reparto de la factura, se calcula que el 40% de los fondos sean públicos y el 60% privados.
El caso de España
Una cosa está clara: cuanto menos eficiente es una vivienda, más emisiones emite a la atmósfera. Y en España no estamos precisamente a la vanguardia. El parque de viviendas de España tiene 45 años de edad media y una calificación energética E. Eso se traduce en que, en nuestro país, las viviendas producen aproximadamente el 14% de las emisiones de CO2, según datos de la Agencia de Medio Ambiente de la Unión Europea.
El motivo de esa baja eficiencia energética hay que buscarlo en las sucesivas burbujas inmobiliarias que ha vivido nuestro país. La primera tuvo lugar durante el llamado desarrollismo franquista, desde mediados de los sesenta hasta finales de los setenta, la segunda llegó después de las olimpiadas de Barcelona 92. La fiebre de la construcción se retomó en 1997, se sostuvo en el tiempo hasta que se derrumbó a causa de la crisis en 2008.
La antigüedad de las viviendas va por provincias. Según datos de Idealista, las de Barcelona son las más antiguas, construidas de media en 1964. Le siguen por la cola Guipúzcoa (1970) y Zaragoza (1974). En el lado opuesto, donde se encuentran las viviendas más nuevas, están Toledo, cuyo año medio de construcción es 2003, seguido de Guadalajara (2001) y Almería (1999).