Crímenes, narcos y relaciones peligrosas: los orígenes donde se curtió Sofía Vergara

A estas alturas es imposible que alguien sobre la faz de la tierra no se haya enterado del sonado paso de Sofía Vergara por nuestro país la semana pasada. La actriz colombiana pasó por Europa fugazmente para promocionar su última serie, Griselda, la cual protagoniza y co-produce. Aquí, Vergara da vida a Griselda Blanco, narcotraficante colombiana y madrina de Pablo Escobar.

Pero lo que realmente se hizo noticia -a nivel mundial- fue su viral entrevista en El Hormiguero, donde un cruce de vaciles entre la actriz y Pablo Motos acabó degenerando en una batalla dialéctica de ironía y desplantes como contestación a algunas de las preguntas de este último. Vergara respondía con un gran carácter y talante a las provocaciones de Motos, algo a lo que ya nos tiene acostumbrados en Estados Unidos.

A pesar de que lo central en tan animado conversatorio no fue la serie, tanto su producción como la fortaleza de Vergara revelan más de lo que se cree de los orígenes de la artista. Sofía vivió en sus propias carnes la crudeza de la peor época del narco colombiano, se relacionó con alguno de los criminales en el país y experimentó la doble dificultad de ser migrante y latina en Hollywood.

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Sobreviviendo al narcotráfico

Que a Sofía Vergara (Barranquilla, 1972) se la relacione con la élite bogotana -los Vergara, una de las primeras familias españolas al llegar al continente como conquistadores-, no la eximió de vivir el horror del narcotráfico en Colombia. El aumento explosivo de la demanda de cocaína y la sangrienta guerra contra las drogas que se inició en la década de los 70 dejó una gran huella en ella.

"Desafortunadamente, crecí en Colombia durante los años 70, 80 y 90, cuando el narcotráfico estaba en auge. Conozco a esas personas. Estaba rodeada de ellos. Sé lo que hicieron. Sé lo que ese tipo de negocio puede hacerle a una familia, a una persona, a un país", contaba la artista en una entrevista con la cadena CBS.

Y cuando Sofía dice que conocía a las personas en ese mundillo, lo dice muy en serio. Su hermano mayor Rafael fue asesinado por el narco en 1998, en Colombia, durante un intento de secuestro. “Él fue parte de ese negocio y lo mataron. Yo llevaba un año en Estados Unidos y tuve que traer a toda mi familia a Miami", reveló la actriz la pasada semana en el programa de Motos.

Vergara había sido descubierta por un cazatalentos un año antes, en una playa de Colombia, donde le ofrecieron hacer un anuncio para una conocida marca de refrescos. Poco después estaría viviendo en Florida, donde se vería obligada a comprar una casa más grande para alojar a su familia y huir de la situación en su país. Sin embargo, el drama familiar no acabaría allí, ya que en 2011 deportarían a su otro hermano Julio de los Estados Unidos por consumo de alcohol y cocaína.

Hollywood, éxitos y capos

"A mí estas tetas gigantes y este cuerpo me abrieron todas las puertas, fue mi pasaporte al mundo con 20 años, cuando empecé como modelo, pero hoy tengo 51 años y sigo dentro". Así describía Sofía su irrupción a la élite del show business este pasado fin de semana en El País.

La barranquillera comenzó en la década de los 90 haciendo varios comerciales y como copresentadora de diferentes programas de televisión para Univisión, cadena hispana en EEUU. Empezaría a darse a conocer en la gran pantalla con preguntas como Chasing Papi (2003), Four Brothers (2005) y las comedias de Tyler Perry Meet the Browns (2008) y Madea Goes to Jail (2009), por la que comenzó a recibir nominaciones. Pero su verdadero éxito vendría sin duda con Modern Family (2009-2020), interpretando el papel de Gloria Pritchett, una mujer migrante colombiana que se casa con el cabeza de la familia, Jay Pritchett. A pesar del éxito experimentado, Vergara ha criticado una y otra vez la falta de oportunidades de los actores latinos en Estados Unidos.

"Tuve un éxito enorme con Modern Family. Desde el primer episodio me volví famosa en todo el mundo, pero soy una latina que no parece tan latina, y no tengo las mismas oportunidades que los actores americanos. No me estoy quejando, sería una ingrata, he hecho mucho más de lo que soñaba, pero me cuesta más encontrar papeles. No puedo hacer de científica, o de jueza tal como me veo. Entonces, decidí buscarme la vida", indicaba Vergara en el citado diario. "Es porque los escritores escriben en general de lo que conocen. Son gringos y hablan sobre su familia... Entonces lo que necesitamos es más escritores latinos que sepan escribir para nosotros. Tenemos menos oportunidades y por eso, por ejemplo, me tocó a mí producir 'Griselda'. Yo quería un personaje así y no me lo estaba dando nadie".

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Ya siendo una actriz reconocida en Hollywood, los vínculos entre Vergara y el narco no se quedaron en Colombia. A Sofía se la vinculó románticamente a mediados de los 2000 con el capo Andrés López. Apodado 'Florecita', se trata de un delincuente iniciado en los laboratorios del valle del Cauca colombiano. Formó parte del Cártel de Cali -una de las organizaciones más perseguidas por la DEA estadounidense-, pero frenaría su actividad tras la muerte de Pablo Escobar, entregándose a la justicia norteamericana en el año 2001 y siendo condenado a 11 años de prisión, pero saliendo en 2006. Ante los rumores de relación con Vergara, esta respondió que simplemente eran amigos.

Aunque solo conocemos una pequeña parte de la intensa vida de la actriz, estamos seguros de que podría lanzar otra serie solo hablando de ella y la veríamos con la misma entrega -y sorpresa- que Griselda.