Una actriz de los 'Bridgerton' denuncia que el equipo la dejó de lado tras sufrir un brote psicótico

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Si pensamos en Los Bridgerton nos viene a la cabeza una serie romántica y a la vez de comedia que destaca por sus extravagantes vestidos de época que nos dejan alucinando. Temporada tras temporada, consigue tener a la audiencia enganchada a la pequeña pantalla y casi sin poder parpadear con las historias de amor entre sus personajes. Primero fue Simon y Daphne, después Anthony y Kate y ahora es el turno de Penelope y Colin.

Sin embargo, no todo es de color de rosa. Menos aún para Ruby Barker, quien interpretó a Marina en las dos primeras temporadas. La actriz ha explicado por primera vez que las grabaciones fueron muy duras ya que sufrió brotes psicóticos y que, como no encajaba en la imagen que querían vender, optaron por no contar con ella para los siguientes rodajes. Irónico que en los últimos años donde la salud mental cada vez está acaparando más escenarios, la intérprete se sintiera aislada por parte de la serie de moda.

Ha sido en el podcast LOAF de la Universidad de Oxford donde ha confesado cómo empezó todo: "Fui al hospital después de una semana de haber rodado la primera temporada de Bridgerton, fue tapado y mantenido con un perfil bajo porque la serie estaba a punto de salir", explicaba. Asimismo, ha añadido que esta situación solo fue a peor debido a los sobre esfuerzos que hizo con su personaje ya que estaba "muy alienado, muy excluido".

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Nadie le brindó ayuda

Si algo ha destacado Ruby Barker es que "ni una sola persona de Netflix, ni una sola persona de Shondaland", le prestó ayuda cuando todo esto empezó. Además, ha querido recalcar que tampoco le han "contactado o mandado un correo para preguntar" si estaba bien o si se "podría beneficiar de alguna forma de cuidado o apoyo".

Para ella, lo que todo el mundo vivió como un triunfo, dado el éxitazo que obtuvo con solo la primera temporada Los Bridgerton, se volvió en una experiencia de lo más agridulce para la joven porque su vida cambió de un día para otro. Más aún cuando no tuvo el apoyo que esperaba para un momento tan importante en su vida.

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"Era casi como si tuviera una metafórica pistola invisible en la cabeza para vender la serie porque esta serie es pizpireta y divertida", comentaba muy triste por sentirse entre la espada y la pared. Sin duda, lo que más invadió al personaje de Marina fue el miedo de estropear todas las estrategias promocionales con sus problemas y que eso la llevará a no poder trabajar nunca más.