Esta herramienta de IA te muestra cómo sería tu calle sin coches, con bicis y zonas verdes
Una curiosa aplicación creada en Países Bajos permite introducir tu calle para recrearla de una manera... idílica.
Los espacios peatonales son fundamentales para crear ciudades más amables. Por un lado, contribuyen notablemente a reducir la contaminación, uno de los problemas más acuciantes de las grandes urbes, así como los accidentes de tráfico que provocan los vehículos privados (más de 10.000 al año sólo en las ciudades españolas). Por otro, fomentan la socialización entre los ciudadanos, que comparten el espacio público de una manera muy distinta a como lo hacen en las calles con estrechas aceras. Pero los beneficios también son económicos: en las calles peatonales aumenta la actividad comercial y el turismo.
Pese a las evidencias, lo cierto es que las calles peatonales son minoría en los principales municipios españoles. Tal y como te contamos recientemente en El Eco de LOS40, casi el 70% del espacio público lo ocupan los coches. Y sin embargo, es posible imaginar, e incluso ver, cómo quedaría cualquier calle si los vehículos a motor dejaran paso a los peatones y a las bicicletas y el asfalto, a las zonas verdes. ¿Cómo? Gracias a la inteligencia artificial.
Utilizando las imágenes de Google, la IA recrea en cuatro fotografías diferentes cómo quedaría la calle tras una transformación verde
La idea la han tenido los responsables de Dutch Cycling Lifestyle, una web creada por las autoridades de los Países Bajos, y con la que quieren compartir un estilo de vivir en el que los protagonistas son los pedales y no los motores. El funcionamiento es sencillo: basta con introducir en este enlace el nombre e incluso el número de la calle que quieras ver para que, utilizando las imágenes de Google, la propia herramienta recree en cuatro fotografías diferentes cómo quedaría tras una transformación verde. El resultado es llamativo.
El paraíso de las bicicletas
Los Países Bajos cuentan con una de las mayores redes ciclistas de toda Europa, sólo comparable a la de otros países de su entorno como Dinamarca. En total, el país cuenta con más de 35.000 kilómetros de carriles bici. Uno de cada tres trayectos se realizan a pedales, muy por encima de la gran mayoría de países europeos. De hecho, en ciudades como Amsterdam hay muchas más bicicletas (800.000) que coches (270.000), según los datos de la propia Dutch Cycling.
No siempre fue así: con el estallido de la crisis del petróleo de 1973, y empujados por las movilizaciones ciudadanas que protestaban contra el aumento de los accidentes protagonizados por los niños que habían dejado de poder jugar libremente en las calles, las autoridades del país decidieron depender menos del crudo e invertir en infraestructura ciclista. Las principales ciudades se transformaron por completo, y el protagonismo indiscutible del coche dio paso a las omnipresentes bicicletas.