Pesadilla en un festival: atrapados en las inundaciones, obligados a dosificar víveres y una posible muerte
La celebración del Burning Man en Nevada (EEUU) se ha visto truncada por condiciones meteorológicas que han puesto en jaque a la organización
Al menos 73.000 personas se daban cita esta semana en el festival Burning Man, una celebración de nueve días en el desierto de Black Rock en Nevada (Estados Unidos), destinado a reivindicar la comunidad, el arte, la autoexpresión y la autosuficiencia. El evento contracultural, situado a 110 millas al norte de la ciudad de Reno, reúne a decenas de miles de artistas, músicos y activistas de todo el país.
Sin embargo, las fuertes lluvias producidas en la zona desértica desde el pasado jueves han hecho que este encuentro se haya convertido en una auténtica pesadilla. Este fin de semana al menos 70.000 asistentes se encontraban atrapados en medio de unas grandes inundaciones. Desde entonces, los accesos al recinto están cerrados.
La propia organización del Burning Man informó que en el lugar del festival cayeron entre 15 y 20 litros por metro cuadrado del pasado viernes al sábado. Precisamente, en “la noche grande” del evento, cuando el público esperaba ver la quema de la mítica esfinge de madera. Sin embargo, la situación meteorológica ha hecho posponer el evento y ya era demasiado tarde para huir: el lodo ha atrapado los coches, bicicletas y cualquier medio de transporte, dejando a miles de personas aisladas. En mitad de toda esta situación, cabe destacar que el popular festival posee una guía de supervivencia donde queda reflejado que en Black Rock cada asistente es "responsable de su propia supervivencia, seguridad y bienestar". Y parece que con las graves inundaciones, esta advertencia se ha materializado.
La organización ha pedido a las personas atrapadas que conserven su comida, agua y combustible y que permanezcan en sus vehículos y tiendas de campaña, evitando salir por su cuenta de la zona. Algo que no se ha cumplido, pues cientos de ellos -entre los que se encuentran celebrities como la modelo Kelly Gale, DJ Diplo o el cómico Chris Rock- escaparon caminando a través del desierto.
"La mitad de nosotros nos quedamos y la otra mitad nos fuimos. Fue muy difícil partir, pero lo bueno fue asegurarse de que hubiera suficiente comida y agua para los que se quedaron. Pagar para que todos se mantuvieran a salvo y salieran sanos y salvos", escribió Gale en su cuenta de Instagram.
Una muerte bajo investigación y últimas actualizaciones
Además de todo este angustioso panorama, la Oficina del Sheriff del Condado de Pershing, en el norte de Nevada, ha anunciado el fallecimiento de al menos una persona en el festival. "Teniendo en cuenta que esta muerte está aún bajo investigación, no hay más información disponible en estos momentos", han anunciado desde la misma en un comunicado oficial anunciado por NBC News. El organismo también ha apoyado la decisión de la organización del evento de mantener allí a las más de 70.000 personas que aguardan en Black Rock. "Algunos vehículos han podido salir de Playa -un lecho de lago seco-, pero han causado daños a la superficie y no se recomienda en este momento", han añadido.
Durante la mañana de hoy en Nevada, la organización del Burning Man ha comunicado que los accesos al festival siguen estando demasiado embarrados para que los asistentes puedan salir del recinto. Prevén que el llamado "éxodo" comience oficialmente al mediodía en Black Rock. Mientras tanto, se pide a los asistentes no salir, incidiendo en que consideren retrasar su salida hasta este próximo martes. Cabe destacar que el festival no ha realizado ninguna declaración con relación a la muerte en proceso de investigación.